Los vecinos de Valleluengo denunciarán en el Juzgado la marginación que sufre el pueblo

Ponen de manifiesto que «el pasado verano denunciamos ante el Procurador del Común de Castilla y León el estado de las calles, (más de la mitad están aún sin pavimentar)». Añaden que «el Procurador del Común dictó una resolución en la que insta al Ayuntamiento a que adopte las medidas oportunas para proceder a la pavimentación de esas calles, puesto que ése es un servicio mínimo al que tienen derecho todos los núcleos de población». Señalan, además, que «el alcalde se compromete ante el procurador a completar la pavimentación en un plazo de cuatro años. Sin embargo, ese compromiso que nosotros en el pueblo aceptamos y recibimos con satisfacción, no es más que una trampa y una burla más, tanto del alcalde como de la Corporación». Llegan a este convencimiento «porque a fecha de hoy no se ha ejecutado aún la partida presupuestaria concedida en los Planes Provinciales del 2005 para la pavimentación de una de las calles. Se han pedido explicaciones y la respuesta, como casi siempre, ha sido un corte de mangas por parte del alcalde. Y también porque el Ayuntamiento no ha incluido a Valleluengo en la solicitud de obras para los Planes Provinciales de este año. También se han pedido explicaciones y la respuesta ha sido similar a la anterior».

A la vista de los hechos, señala Fuente Ferrero en un escrito, «los vecinos de Valleluengo nos hemos cansado, estamos hartos de tanta monserga y decidimos, de una vez, exigir nuestros derechos como ciudadanos. Esto quiere decir que no vamos a seguir consintiendo ningún tipo de desprecio de parte de nadie y menos del alcalde (es el representante de todos y a todos debe respeto) y, del mismo modo, reclamaremos de la Corporación equidad (igualdad) de trato y de atención, para las cuatro localidades que forman parte del municipio». Sobre el particular, sugiere «a los concejales que se lean la resolución del Procurador del Común». Han salido a la palestra, según recalcan, porque «a la luz de los acontecimientos en torno al cementerio nuclear, hemos podido constatar que uno de los factores que contribuyen en buena medida al deterioro de nuestros pueblos es la falta de iniciativas y de liderazgo por parte de los ayuntamientos. Incluso, en alguno de ellos, los alcaldes suponen una auténtica rémora o freno en su desarrollo».

Anuncian que «los vecinos de Valleluengo tenemos nuestro propio caso y, desde hace algunos años, venimos aguantando los desprecios del alcalde de Rionegro. Primero fueron comentarios irónicos, frases alusivas al pueblo, que nosotros, en nuestra buena fe, (ingenuidad), nos lo tomábamos medio en broma, la gente decía: "no hagáis caso? son cosas de Lucas?" Ahora, aquellos comentarios burlescos se han ido convirtiendo en hechos que, a nuestro modo de ver, son lo suficientemente graves como para denunciarlos públicamente. El último caso que colmó el vaso de lo tolerable ocurrió el pasado sábado, día 16, con el episodio del incendio de una casa y que los vecinos han presentado la correspondiente denuncia ante el puesto de la guardia civil de Mombuey. Lamentablemente, éste no es un hecho aislado, sino que forma parte de todo un contexto, de un- comportamiento intencionado, por parte del alcalde, pero también de la propia Corporación, primero está la actitud de desprecio que el señor Lucas manifiesta de manera continua hacia nuestro pueblo y, en segundo lugar, la política de exclusión que sobre Valleluengo está practicando el Ayuntamiento de Rionegro, de manera sistemática».