Castilla y León invirtió 26,8 millones de euros entre 2007 y 2015 en países con un régimen fiscal preferente, entre los que se encuentran los paraísos fiscales y otros estados como Suiza y Panamá, en boga en las últimas semanas por las empresas pantalla, un modelo que no siempre implica la evasión de impuestos.

De hecho, según la información de la Secretaría de Estado de Comercio a la que tuvo acceso Ical, la mayor parte del destino de estos fondos por parte de particulares y empresas de la comunidad acabó en las fronteras suizas, con 24,8 millones, el 92,4 por ciento del total, mientras que por sectores, principalmente se dedicaron a servicios financieros y actividades crediticias, al que fueron a parar casi 97 de cada cien euros (25,9 millones).

Así, el país alpino recibió la mayor parte de esta cantidad regulada durante el periodo de estudio, si bien más de 20 millones salieron de la comunidad sólo en el año 2008, en el arranque de la crisis económica.

También Panamá recibió una inversión de castellanos y leoneses que ascendió en estos nueve años a medio millón de euros. El país centroamericano, que cuenta con un sistema de fundaciones similar al de Lietchtenstein para garantizar el anonimato de sus beneficiarios, se encuentra fuera del listado de paraísos fiscales establecido por España desde 2011.

El único paraíso fiscal -considerado como tal por la OCDE y el Estado español- al que los inversores regionales han dirigido su dinero desde 2007 es Jordania, que ha absorbido 1,57 millones de euros, todo ello en el año 2013 y en servicios financieros, tal y como desvela el informe.

Además de sectores vinculados a créditos y servicios financieros (25,9 millones de euros), el montante que los castellanos y leoneses invirtió en este tipo de mercados se ciñe a I+D experimental en ciencias naturales y técnicas (844.940 euros), ingeniería civil (73.890 euros) y otras actividades profesionales científicas y técnicas (2.450 euros).