La estrella de la huerta, mejor en la mesa, eso es lo que parecían decir ayer los vecinos de Micereces de Tera en la celebración de la exaltación del pimiento.

La mayoría del vecindario de Micereces salía ayer a la calle por un doble motivo: por la celebración de los actos de exaltación del producto hortícola más reconocido de la vega del Tera y por los festejos dedicados a la Virgen del Rosario.

La plaza del parque y del Ayuntamiento se convertía en mesa y mantel para la numerosa representación vecinal, expectante ya cuando las horas del reloj marcaban las tres de la tarde para degustar la fritada de pimientos y la paellada. Merecía la pena esperar porque si el olor de la fritada llenaba el parque, no menos lo hacía el de la paella elaborada para 200 comensales a base de carne de pollo y de mariscos. Ah! y no podían faltar los pimientos y un poco del aceite de la fritada en el gran recipiente.

Si el ágora de Micereces de Tera olía a pimientos, el producto estrella de la huerta no podía estar ajeno en el ornato dispuesto en el espacio público. Ramas de pimientos colgadas de los árboles marcando el dominio en la economía familiar de no pocas casas de Micereces. El pimiento morrón, el más excelente por su carnosidad y perdurable sabor en boca, ha venido siendo relegado en los últimos años por la variedad de lamuyo, porque ésta tiene menos pérdidas en la planta.

El rico sabor del no menos excelente producto estaba asegurado como lo ha estado la campaña de recolección, a punto ya de cerrar sus puertas.

Mientras los sones musicales del grupo de música tradicional "los Valles", procedente de la zona vallisoletana limítrofe con la comarca zamorana de La Guareña, marcaba su acento en la plaza, los comensales estaban ya dispuestos a dar buena cuenta de paellada y de fritada. La jornada de exaltación del pimiento se prolongaba por la tarde con la actuación del mago Toño y la sesión de baile con la disco móvil Electromon.

En esta jornada del sábado, dedicada a la Señora del Rosario, se celebra a las 12.30 horas la procesión y la misa en honor a la Virgen, una actuación de flamenco fusión con la Keka, una merienda popular y la verbena con disco Sonido. La programación festiva viene de la mano del Ayuntamiento, del bar Isabel y de la huerta del Tera.