La Concejalía de Urbanismo se ha visto obligada a realizar apercibimientos a los propietarios de tres edificios, dos de ellos protegidos, y a las constructoras responsables de dos grúas, por el estado de deterioro que presentan los inmuebles y la existencia de riegos a terceros en el primer caso, y por el largo tiempo de ocupación de la vía pública en el segundo.

Urbanismo ha advertido a los propietarios de un inmueble de la calle La Rúa de su obligación de mantenerlo ante el avanzado estado de deterioro de la cubierta y del interior del edificio. Este apercibimiento no es nuevo, ya se produjo hace meses y la Concejalía sigue a la espera de que la propiedad actúe, sin descartar, como en el resto de casos, realizar algún tipo de comunicación al Juzgado.

Otro tanto ocurre con un edificio de la calle Cortes Leonesas, cuya cubierta se encuentra también en avanzado estado de deterioro y puede ocasionar desprendimientos y daños a terceros. En este caso en concreto, la Concejalía de Urbanismo se ha visto obligada a pedir ayuda al Instituto Nacional de Estadística para localizar las direcciones de todos los co-propietarios y notificarles el estado en que se encuentra el edificio y su obligación de mantenerlo.

Fuentes de la Concejalía explicaron que en los casos de los edificios protegidos la ley obliga a los propietarios a realizar el mantenimiento que sea necesario, lo que no se está cumpliendo en la mayoría de los casos, sobre todo en los edificios cuyo mal estado es tan evidente como avanzado. El Ayuntamiento, sin medios económicos para realizar actuaciones subsidiarias en estos inmuebles y cobrárselos luego a los propietarios, «sólo puede realizar apercibimientos y en última instancia acudir al Juzgado», insisten las mismas fuentes.

Otro tanto ha ocurrido con un edificio, este sin protección, en la calle Fortaleza. En este caso sin embargo, la propiedad se ha avenido tras varias notificaciones a realizar una obra valorada en 30.000 euros que de no ejecutarse hubiera puesto en peligro uno de los muros del paseo interior de la Mota.

Urbanismo ha realizado también apercibimientos a las constructoras que instalaron sendas grúas antes de comenzar la crisis en las avenidas Federico Silva y Luis Morán. En el segundo caso, el promotor ha pedido ampliación de licencia y garantiza el mantenimiento de la instalación. En el segundo, se han realizado comunicaciones sin éxito. La grúa lleva instalada e inoperativa más de tres años sin recibir, al parecer, mantenimiento de ningún tipo.