El campo inicia la peor campaña de cereales del siglo por la sequía

El campo español comienza esta semana oficialmente la nueva campaña de cereales 2023-2024, la peor del siglo y las últimas cuatro décadas por las bajas cosechas a causa de los estragos de la sequía. La nueva temporada de cereales empieza oficialmente cada 1 de julio, pero en la práctica los agricultores inician antes la recolección en las zonas más tempranas y este año se ha anticipado aún más ante la escasez como consecuencia de la falta de lluvias.

Los portavoces del sector agrario coinciden, en declaraciones a Efeagro, en que se esperan unos resultados "dramáticos", "espantosos" partiendo de que el año pasado ya hubo una baja cosecha e insisten en que se batirán marcas, pero en cuanto a bajos volúmenes.

España, país deficitario en grano, también necesitará un abastecimiento récord de cereales importados, que algunas fuentes sitúan en 25 millones de toneladas, para garantizar la materia prima de alimentos o de piensos.

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Los aforos de cosecha de las organizaciones agrarias, de las cooperativas y del comercio mayorista (agrupado en Accoe) vienen apuntando desde hace semanas al descenso notable de cosecha.

Según Accoe, la producción española de cereales de invierno (trigo, cebada, avena o centeno) disminuirá un 45,2 % respecto al año pasado, será la peor de las tres últimas décadas, y se situará en ocho millones de toneladas; Asaja cifró en junio esa caída en un 65 % y en los cinco millones de toneladas el volumen recolectado.

"Sin duda es una de las peores campañas, en secano y en regadío, por la sequía brutal", remarca el secretario general de COAG, Miguel Padilla, que además ha recordado que los productores de arroz (cereal de primavera), no han podido sembrar por falta de agua.

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“La peor cosecha con diferencia en 30 o 40 años; una campaña malísima, esperamos que no se repita más”, según David Erice, de los servicios técnicos de UPA.

En muchas explotaciones de Castilla-La Mancha, Aragón o de Cataluña la cosecha será “prácticamente cero” y en el sur, en Andalucía, la recolección fue rápida y comenzó en mayo, con rendimientos por hectárea especialmente bajos en trigo.

El responsable sectorial de cereales de COAG, José Roales, señala desde Zamora que en Castilla y León se están segando campos de cebada algo mejor de lo previsto, pero sentencia que a escala nacional la cosecha será “espantosa”.

Esta situación contrasta con los aforos de cereales de otros países hemisferio norte, según los cuales la oferta internacional será abundante.

Sin embargo, los precios de los cereales en España están subiendo pero no son altos teniendo en cuenta la escasa oferta y están a los niveles previos a la guerra de Ucrania, proveedor importante de grano al mercado español.

El trigo blando aumentó su cotización un 1,69 % en la última semana cerrada en los mercados mayoristas, el maíz un 2,2 % y la cebada un 1,05 %, según los datos de Accoe.

“No es normal que (los precios) estén tan bajos”, según Erice, quien apunta que también este año se necesitará una importación récord, que sitúa en 25 millones de toneladas.

“No sé cómo vamos a ser capaces, en algún momento habrá tensiones de abastecimiento por cuestiones logísticas“, según el representante de UPA