Con madera de opositor, Miguel González descubrió toda la labor que se hace en el juzgado de menores. "Ahí estuve con un magistrado, con el secretario judicial, con parte del funcionariado para ver cómo se abren los procesos, se archivan y los programas que usan para ello, además de presenciar un juicio y conocer su estructura", relata con una sonrisa. Esta experiencia ha corroborado su intención de estudiar derecho. "La oposición podría ser a judicaturas", apunta como opción.