La demora en la concesión de licencias urbanísticas y de actividad es uno de los grandes problemas que el equipo de Gobierno ha enfrentado durante este mandato. No en vano, está reciente el foro profesional para aportar ideas sobre cómo mejorar los plazos en este sentido. Sin embargo, la Concejalía de Comercio considera que, siendo este un asunto de especial relevancia para el desarrollo de negocios en la capital, no resulta el conflicto principal. "Sí que es verdad que el Ayuntamiento de Zamora tiene que mejorar notablemente los tiempos que actualmente se manejan para la concesión de licencias, pero todos sabemos que ese no es el problema del pequeño comercio de Zamora, sino que lo que está sufriendo es un cambio muy fuerte sobre cómo estructurar la oferta", señala Christoph Strieder.

Las grandes superficies son, a juicio del concejal, el desencadenante de la crisis del pequeño comercio. "Estos espacios son sin duda el problema de fondo del comercio en Zamora. Y debemos preguntarnos cuál debe ser la política comercial de nuestra ciudad y quién puede tomar decisiones sobre esa política", comenta Strieder. "Es un tema en el que existe mucho fondo y mucho calado, porque al final lo que determina si un negocio funciona o no funciona es el propio ciudadano", concluye el concejal de Comercio y Turismo del Ayuntamiento de Zamora.