El técnico portugués del Real Madrid, José Mourinho emitió, durante la tarde de ayer, un comunicado en la página web del club en el que desmentía que tuviese la intención de dimitir de su cargo. De este modo, el preparador luso salía al paso de los rumores que hablaban de que el entrenador blanco estaba meditando abandonar la entidad madrileña tras los incidentes acaecidos en los instantes finales del partido de vuelta de la Supercopa de España. que enfrentó a su equipo con el FC Barcelona.

La noticia de la posible marcha de Mourinho saltó a la una de la tarde del día de ayer, cuando Canal + aseguró que el portavoz del técnico blanco, Eladio Paramés, había declarado que el entrenador portugués estaba meditando dejar el club porque no se sentía «arropado por la directiva» y que meditaba convocar una rueda de prensa para anunciar su salida del Real Madrid.

Fue entonces cuando Eladio Paramés, portavoz de José Mourinho, desmintió que el técnico portugués estuviese meditando abandonar el Real Madrid por falta de apoyo de la directiva tras los incidentes ocurridos en la Supercopa de España ante el FC Barcelona. El portavoz de Mourinho explicó a la agencia Efe en una conversación telefónica que alguien se había hecho pasar por él al hacer unas declaraciones a Canal+. Esta cadena difundió entonces una información relativa a la posibilidad de que el entrenador dejase el club, obtenida a través de mensajes a un número de móvil que ya no pertenece a Paramés, asegura éste.

«Todo lo que ha pasado es muy extraño, porque yo desde hace casi un año no tengo ningún número español. Según me han asegurado, alguien se ha hecho pasar por mí cuando le han pedido una entrevista y ha dicho una noticia que es falsa», señaló.

El número de móvil que pertenecía al portavoz de Mourinho hace un año era de tarjeta de prepago y, al darse de baja, ha sido asignado a otra persona, dijo. «Yo solo tengo mi número portugués», insistió.

Paramés descartó con rotundidad que en este momento Mourinho no se sienta arropado en el club. «No tiene sentido nada de lo que se ha dicho. Que nadie piense que José no está cómodo, porque es falso».

«Puedo asegurar que la relación que él tiene con el presidente Florentino Pérez, con la directiva y con José Ángel Sánchez, con quien habla casi a diario, es muy buena» aclaró.

«Además quien le conoce sabe que él no es así. Todo lo contrario. Siempre es el primero en dar la cara por su equipo y sus jugadores», añadió.

Canal+ Liga difundió en un primer momento la noticia y emitió un comunicado en el que aseguraba, entre comillas, que Paramés había confirmado que «José (Mourinho) no se siente arropado por los dirigentes y medita abandonar el club». Antes de la conclusión del programa «Más deporte», la cadena ya incluyó las palabras del portavoz de Mourinho aclarando lo acontecido.

Por su parte, a la vista de los acontecimientos, José Mourinho decidió utilizar la plataforma oficial del club en internet para expresar su opinión sobre el asunto y desmentir rotundamente las afirmaciones que le situaban fuera de la entidad madrileña. El técnico del Real Madrid, aseguró en una carta difundida por la web del club que no se marcha, que su «madridismo es mucho más grande que el de algunos pseudomadridistas» y pide disculpas por su «actitud» en los incidentes de la Supercopa de España ante el Barcelona.

«Solo quien no me conoce puede soñar, inventar o creer que pueda marcharme ahora del Real Madrid", inicia su escrito el técnico portugués. «Me parece que mucha gente se quedó impresionada con la calidad del fútbol demostrado por el Real Madrid en esta pretemporada, y sería para ellos una sorprendente noticia que yo abandonara el club ahora. ¡Imposible!», afirma. «No me marcho. Seguro. ¡Segurísimo!», añade.

Mourinho destaca el buen momento por el que pasan sus relaciones con los altos cargos del club. «Tengo un presidente fantástico, con una gran inteligencia, y al que además me une una gran amistad. Y tengo también un director general que trabaja para el club 24 horas al día, por lo que siento que mi motivación es enorme y mi madridismo mucho más grande que el de algunos pseudomadridistas».

Cierra su carta Mourinho tratando los incidentes vividos en el Camp Nou, cuando en los últimos compases de la final de la Supercopa, metió un dedo en el ojo del segundo técnico del Barcelona, Tito Vilanova, que le respondió con un golpe en la nuca. «Y quiero dirigirme al madridismo para disculparme ante él, y solo ante el madridismo, por mi actitud en el último partido. Algunos están más adaptados que yo a la hipocresía del fútbol, lo hacen con la cara escondida, con la boca tapada y en lo más profundo de los túneles». «Yo no aprendo a ser hipócrita. Ni aprendo ni quiero», sentencia Mourinho.

Por otro lado, el entrenador del Real Madrid podría ser suspendido entre 4 y 12 partidos por el incidente que protagonizó con el ayudante de Pep Guardiola, Tito Vilanova, en el partido de vuelta de la final de la Supercopa de España, disputado en el Camp Nou, informó el Comité de Competición de la RFEF.

El Comité de Competición ha abierto un procedimiento disciplinario extraordinario a José Mourinho por meter el dedo en el ojo al segundo entrenador del FC Barcelona Tito Vilanova en la tángana final provocada por la dura entrada de Marcelo al centrocampista del Barça Cesc Fábregas.

Mourinho se enfrenta a una multa de 602 a 3.006 euros si su conducta es calificada como «grave» y a una sanción que consistiría en la suspensión de 4 a 12 partidos si la acción contra Tito Vilanova se considerada agresión, con lo que se le aplicaría en el artículo 98 del Código Disciplinario de la RFEF.

Por otro lado, Tito Vilanova podría ser sancionado con la suspensión de hasta cuatro partidos o multa hasta 602 euros si la acción realizada contra el técnico del Real Madrid se considerara leve e incurriera en el artículo 122 de Código Disciplinario de la Federación.

A su vez, tendrán que cumplir una sanción de un encuentro los jugadores David Villa y Ozil, expulsados por enfrentarse entre ambos tras la entrada de Marcelo y el propio lateral brasileño por la roja directa que vio por dicha entrada a Cesc Fábregas.