El reconocimiento de esta escombrera se realizó en una sesión plenaria tan convulsa o más que las anteriores por cuanto que la mayoría de los concejales optaron por levantarse y abandonar la sesión al no aceptar el alcalde el debate y la votación de las mociones llevadas a Pleno. Además, fue expulsado del salón un vecino y, por si fuera poco, otro asistente relacionado con una concejal del PP violentó a dos ediles de la oposición al Equipo de Gobierno, a los que parece ser «empujó y zarandeó», por lo que éstos estudian llevar el caso al Juzgado.

El alcalde del municipio, Alejandro Fermoselle, decidió no valorar la urgencia de la moción a tratar e impidió su votación. Entre las mociones está «dejar solo la telefonía fija del Ayuntamiento y destinar el gasto de los móviles al pago de las deudas con Caja Rural y a los vecinos acogidos al ARI». Ante el rechazo de la Alcaldía de debatir y votar las mociones los concejales del PSOE, de Adeiza, y uno de los no adscritos decidió abandonar el Pleno. Miguel Ángel Prieto señaló que volverán a denunciar el caso en el Juzgado, que ya les dio la razón, y recalcó que «corresponde al Pleno la valoración de la urgencia de las mociones llevada a la sesión».