El Consejo de Administración de Caja Duero ratificó hoy con 13 votos a favor, tres en contra y ninguna abstención el acuerdo de fusión con Caja España en una reunión a la que no asistió uno de sus miembros, Francisco Rubio. El presidente de la entidad, Julio Fermoso, afirmó que "todo quedará en agua de borrajas" sino se respeta el plan laboral por lo que pidió tranquilidad a los empleados.

En ese sentido, Fermoso en la comparecencia ante los medios, tras el Consejo de Administración, que se prolongó por espacio de una hora y media, precisó que el pacto con Caja España "no es un acuerdo de fusión" sino "una pieza más de un largo puzzle que tiene todavía otros muchos procesos" como la negociación laboral. Así, el presidente de Caja Duero aseguró que no habrá "movilidad ni mínima, ni máxima". "Si hubiera un problema quedaría en agua de borrajas todo lo que hasta ahora se ha hecho", sostuvo.

Por tanto, Fermoso señaló que el acuerdo alcanzado con Caja España es un "buen pacto con visión de futuro para crear una nueva caja con gran solvencia y que estará a la cabeza en el ranking de España en la séptima posición". Destacó que el volumen de negocio y la gestión comercial, que acogerá la ciudad Salamanca, será el "doble" y "parecida" a las de las cinco firmas financieras más importantes del país.