El desplome de los cuestos de la Mota, y con la caída de parte de la ladera el hundimiento de la pasarela, la que había sido una obra estrella del equipo de Gobierno presidido por Saturnino Mañanes, cumplió ayer su quinto aniversario. Cinco años después del episodio, que se preveía y se produjo de madrugada, la actuación en la ladera se ha mostrado efectiva y no se han reproducido los problemas. En la solución se gastaron más de dos millones de euros.