Un total de 77 jóvenes belgas, entre estudiantes y profesores, tuvieron que ser auxiliados en la jornada de ayer por el Ayuntamiento de Manganeses de la Polvorosa tras sufrir una avería el autobús en el que venían realizando una gira de estudios. El autobús del viaje cultural y pedagógico por tierras portuguesas y españolas del grupo de 69 estudiantes y 8 profesores se tuvo que salir de la autovía A-52 a las seis de la mañana de ayer, recalando en Manganeses de la Polvorosa a la entrada del pueblo, debido a una avería. Los conductores del vehículo dieron aviso a la Guardia Civil y compañía de seguros advirtiendo de la necesidad de detenerse en Manganeses. Una vez que algunos de los rezagados estudiantes se despertaron el grupo llegó hasta el pueblo donde auxiliados por personal del Ayuntamiento se encaminaron hasta el pabellón deportivo y el Hogar de los Jubilados para reponer fuerzas.

El grupo de estudiantes bruselenses pertenecientes al instituto de enseñanza secundaria «Gatti de Gamond», en el centro de la capital belga, había salido el pasado miércoles en dirección a tierras ibéricas, lusas y españolas, para una gira cultural con objeto de realizar estudios tanto en lengua inglesa como flamenca, de los lugares de visita.

El viaje pedagógico forma parte también de un proyecto del curso de las nuevas tecnologías, aseguraba ayer una de las integrantes del grupo de profesoras que atienden a los estudiantes. La asturiana, Laura Vallejo López, que viene impartiendo clases de inglés en el Instituto de la capital bruselense manifestaba encendidos elogios para el pueblo de Manganeses por su acogida. «Sin pretenderlo hemos llegado a Manganeses de la Polvorosa, este bonito pueblo de Zamora donde nos han acogido con mucha hospitalidad». La alcaldía dispuso en todo momento el recinto del pabellón deportivo para que los jóvenes pudieran cobijarse hasta su regreso a Bruselas. Estamos muy contentos, el Ayuntamiento, el bar del jubilado, las panaderías, todos se han volcado con nosotros, son gente formidable», decía al mediodía de ayer Laura Vallejo mientras un agente de la Guardia Civil le indicaba que les iba a recoger un autobús para trasladar a todo el grupo hasta Benavente para su regreso hasta la capital de Bélgica.