La del río Duero a su paso por Zamora capital es la única zona de baño de Castilla y León cuya agua no es apta para su uso recreativo, según la actualización del mapa oficial válido hasta el próximo viernes, 28 de agosto, realizada por la Consejería de Sanidad de la Junta.
Los análisis realizados el pasado lunes en la zona de Los Pelambres han vuelto a dar negativo y por tanto por segunda semana consecutiva estará prohibido en baño en la playa urbana, que ya tuvo problemas en su primera temporada de funcionamiento exactamente por el mismo motivo.
Según señaló el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Zamora, Romualdo Fernández, los análisis detectan la presencia en mayor concentración de la permitida, de una bacteria que suele ser característica de las aguas fecales. De hecho el Ayuntamiento sospecha de la existencia de algún posible punto de vertido ilegal aguas arriba de la ciudad que sería el responsable de las inadecuadas mediciones de los contaminantes en los análisis que se llevan a cabo para comprobar la idoneidad del agua de baño y que se renueven cada semana. De momento no se ha podido determinar ese punto de vertido, lo que no significa que sea imposible su localización.
La idea es, en todo caso, potenciar el atractivo de las riberas del río tanto para los lugareños para los visitantes, y contar con una zona de baño es fundamental en esta estrategia. También es verdad que hay gente que tampoco hace mucho caso al resultado de los análisis, y se sigue bañando en las aguas del río Duero, pese a que no estén declaradas aptas para el baño, como ha ocurrido en estas dos últimas semanas del mes de agosto.
El resto de las zonas de baño de la provincia funcionan con normalidad y los análisis de las aguas determinan que éstas se encuentran en perfectas condiciones para darse un chapuzón. Los bañistas no pueden utilizar la del embalse de Valparaíso en Villardeciervos ni la del río Tera en Camarzana de Tera, pero es porque los respectivos ayuntamientos han decidido no mantener operativas estas zonas debido a las medidas a las que obliga la pandemia de coronavirus.
Sí se pueden utilizar las cuatro playas del Lago de Sanabria, en el municipio de Galende, la del río Órbigo, en Santa Cristina de la Polvorosa, las del río Tera en Villanázar, Milles de la Polvorosa y Burganes de Valverde y la del embalse de Ricobayo, en Muelas del Pan.
Zamora es, junto con León, la provincia con una mayor cantidad de zonas de baño naturales tanto en ríos como el embalses, que están siendo muy utilizadas este verano sobre todo por el empuje del turismo interior frente a otras fórmulas de ocio estival de costa o puntos más alejados del lugar de residencia habitual.
