Pedimos por la diocesis de Zamora los presbiteros y diaconos. Deseamis que pronto recibais a un nuevo obispo deseo BlazquezEl presidente la Conferencia Episcopal monseñor Ricardo Blázquez ha presidido en la iglesia de San Ildefonso los actos fúnebres por Gregorio Martínez Sacristán, el obispo de Zamora fallecido viernes a los 72 años. La ceremonia ha contado con la presencia de 36 obispos y 110 sacerdotes.

Tras el responso, un gran número de fieles ha acompañado en procesión los restos de Gregorio Martínez Sacristán hasta la plaza de la Catedral, donde tiene lugar la misa exequial con la presencia del arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez; el arzobispo emérito de Madrid Antonio María Rouco Varela, el arzobispo de Santiago de Compostela, el zamorano Julián Barrio; el obispo de León, Julián López.

El féretro con los restos mortales de Gregorio Martínez ha sido portado a hombros por los fieles hasta la Seo. A continuación, le ha seguido un séquito formado por las autoridades y miembros de Cofradías así como representantes de todo tipo de entidades religiosas y fieles en general.

Presidentes de las cofradías de la Semana Santa de Zamora han asumido el penúltimo relevo del féretro del obispo desde la plaza de Arias Gonzalo a la Catedral. El último ha corrido a cargo de los sacerdotes que han sido los encargados de introducir el ataúd a la Catedral.

La comitiva ha sido recibida con el toque de campana de la Asociación de Campaneros de Zamora. A su entrada al interior del templo, la coral ha entonado los salmos para recibir el cuerpo del prelado.

Los obispos han ocupado un lugar preferente en un templo abarrotado de devotos. Se han habilitado pantallas de televisión a lo largo de las naves de la Catedral para que todo el mundo pueda ver el acto.

Ha sido el cardenal Blázquez quien ha presidido la misa exequial rodeado por los obispos llegados de toda España. Durante el sepelio, el ataúd ha estado cubierto por la casulla, el báculo y la mitra del obispo.

Una feligresa ha sido la encargada de la lectura del libro de la Sabiduría. "El justo aunque muera prematuramente tendrá descanso", ha leído.

El obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, padecía cáncer.

En la homilía, monseñor Blázquez ha recordado la biografía del prelado madrileño y las dolencias que han terminado con su vida. "Dios nos encomienda una misión y la llamada de Jesús y el cumplimiento de la misión comporta gozo y sufrimiento. A don Gregorio le ha marcado la cruz de la enfermedad. Cuando parecía que había alcanzado una fase afable, llegó el diagnóstico demoledor: cáncer avanzado", ha dado a conocer Blázquez.

"Es muy duro verse limitado por la enfermedad", indicó el prelado, quien hablo de que siempre es posible la esperanza aun a las puertas de la muerte. "La vida y la muerte del cristiano reciben su sentido con la comunión con Jesús resucitado que pedimos a favor de don Gregorio. Dale señor el descanso eterno", pidió el presidente de la Conferencia Episcopal a "una persona que ha sufrido tanto".

"Deseamos que pronto recibáis a un nuevo obispo", ha deseado tras quince minutos de homilía Blázquez, quien ha estado acompañado en el altar por los monseñores Carlos Osoro y Rouco Varela, arzobispo de Madrid y emérito, respectivamente.

Al final de la misa, José Francisco Matías Sampedro, vicario general y administrador diocesano, intervino para hacer una semblanza del que durante casi trece años ha dirigido la diócesis de Zamora. "Hombre de semblante sereno humilde en las formas y firme en las convicciones", describió.

Asimismo, Matías Sampedro ha denunciado el abandono de las autoridades zamoranas y ha defendido la labor pastoral de don Gregorio, al que reconoció su entrega por la diócesis. "Sufría por no poder hacer más. Se ha sentido siempre uno de nosotros. Agradezco a aquellos que le tendieronla mano en su labor episcopal".

Por otro lado, en nombre de la familia, como los hermanos Agustín y Victoria, el vicario agradeció el trato recibido por don Gregorio en la diócesis. Además, el encargado de negocios de la Nunciatura transmitió el pésame del Papa y la bendición apostólica de su Santidad.

Los restos mortales del obispo de Zamora ya descansan en una capilla de la Catedral al lado del Cristo de las Injurias donde descansan mirando hacia oriente, hacia el altar, por expreso deseo del finado.

Un reducido séquito compuesto fundamentalmente por los obispos y el cabildo catedralicio es el que ha asistido exclusivamente a la inhumación del féretro. La sepulrura se ha practicado en un hueco abierto en el suelo de la seo donde el obispo Gregorio descansa de sus fatigas como dijo monseñor Blázquez.

Desde las 13.25 horas, el cuerpo sin vida del obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, reposa para siempre bajo una losa de granito en el subsuelo de la Catedral.

Llegada del féretro del obispo de Zamora a la iglesia de San Ildefonso:

Responso en la iglesia de San Ildefonso:

Traslado del féretro hasta la Catedral de Zamora:

Llegada del féretro a la Catedral de Zamora:

Misa funeral en el interior de la Catedral:

Puedes ver las imágenes del entierro de Gregorio Martínez Sacristán, aquí: