El obispo de Zamora Gregorio Martínez Sacristán falleció el viernes 20 de septiembre de 2019 a los 72 años a causa de una complicación renal tras el trasplante de riñón al que se sometió en 2017.

"Nuestra tarea consiste primordialmente en sembrar el Evangelio, con nuestra palabra y nuestras obras, en medio de los diversos ámbitos donde se despliega nuestra vida". El último tuit que escribió el obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, apenas 24 horas antes de su fallecimiento, resume la idea principal de la labor pastoral de quien durante 13 años rigió los destinos de la diócesis de Zamora. Trece años en los que el obispo de Zamora afrontó la despoblación y la entrada de mujeres en las cofradías de Zamora.

Durante su periodo al frente del Obispado, Gregorio Martínez Sacristán también protagonizó varios desencuentros polémicos con el Ayuntamiento de Zamora que preside Francisco Guarido.

Tal y como avanzó la Diócesis, el cuerpo sin vida sería enterrado en el trascoro de la Catedral de Zamora. Un templo en el que no se celebraba un entierro desde hace casi cien años. Además, Gregorio es el primer obispo fallecido en activo.

Como recordaba José-Andrés Casquero Fernández en este artículo titulado "Exequias", antaño el funeral de un obispo era un acontecimiento social, el duelo era general y se informaba de cada detalle del funeral.

Con su fallecimiento, se da la casualidad que la provincia de Zamora se queda sin prelado de las dos diócesis que vertebran el territorio tras la muerte también del obispo de Astorga en mayo de 2019.

Tras conocer su muerte, la sociedad católica y la civil ha mostrado su respeto por la figura de "don Gregorio". (Reacciones de Isabel García Prieto, José Francisco Matías, Florián Ferrero, Francisco Guarido, Francisco José Requejo y Clara San Damián).

Durante el domingo, la capilla ardiente se instaló en la iglesia de San Andrés, donde el pueblo veló a su pastor.

Y este lunes, el obispo de Zamora ha recibido sepultura en el trascoro de la Catedral de Zamora.

Durante la misa exequial, el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, ha dado a conocer que el obispo padecía un cáncer avanzado. Ahora, Roma decidirá quién sustituye al obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán.