El masajista y profesor de yoga denunciado por cinco zamoranas por abuso sexual ofrecía datos falsos cuando ofrecía sus servicios, se sospecha que para ocultar su verdadera identidad, según la información difundida por la Comisaría de Zamora. De este modo, se cree que trataba de impedir que la policía pudiera localizarle en caso de que alguna de sus presuntas víctimas decidiera emprender acciones contra él. Mantenerse en el anonimato podría haberle sido relativamente fácil, puesto que el investigado reside en la provincia de Palencia, desde donde viajaba para ofrecer sus servicios profesionales.

En uno de los negocios de la capital a los que acudió se presentó como un madrileño que quería instalarse en Zamora y que, por motivos familiares, llevaba tiempo trasladándose desde esa capital para trabajar fuera de su residencia habitual. "Con cierta asiduidad acudía a Zamora para ofrecerse como masajista o profesor de yoga", apuntaba ayer la Policía Nacional.