En una nueva sesión carente de contenido, el debate creado en torno a la aprobación de las mociones volvió a centrar el Pleno ordinario de la Diputación de Zamora celebrado ayer. En apenas diez minutos, la Corporación había ventilado los dos primeros puntos del orden del día: la aprobación de una modificación de los estatutos de la Mancomunidad Tierra del Vino y la subida salarial del personal corporativo de acuerdo al incremento retributivo de los funcionarios.

Así, a falta de más asuntos a tratar, comenzó el turno de mociones y el baile de votaciones con el nuevo sistema electrónico al que los diputados continúan acostumbrándose. Juan Dúo, vicepresidente primero, fue precisamente el primero en equivocarse al votar en contra de la propuesta de su propio partido: el Plan Estratégico de Subvenciones. Al igual que en 2018, la Diputación repartirá más de 14 millones de euros en ayudas, destinadas principalmente a los servicios sociales, a los planes provinciales de obras (6,5 millones) y al desarrollo económico (3 millones). No obstante, su aprobación no estuvo exenta de controversia. Izquierda Unida criticó el fondo por su tardanza y los criterios "partidistas" de su distribución y el PSOE reprochó la forma ante el calado de la cuestión: "¿Cómo son tan comprensivos para la falta de eficiencia y eficacia en la gestión política de los asuntos que nos traen al Pleno y luego son ustedes tan exigentes y escrupulosos con los ayuntamientos que tienen algún problema con la presentación de documentación?", se preguntaba.

Si bien es cierto que se produjeron las habituales disputas y discusiones en clave electoral ante la cercanía de los comicios, la concordia reinó la sesión. A instancias del diputado de Ciudadanos, David Carrión, el Pleno aprobó por unanimidad la creación de un museo homenaje a Antonio Álvarez Pérez, maestro de Ceadea y creador de la mítica Enciclopedia Álvarez.

A propuesta de Izquierda Unida, la Corporación también acordó en bloque instar al Gobierno central y a la Junta de Castilla y León a que ambas instituciones incluyan a Zamora en los proyectos e inversiones del Corredor Atlántico para que la provincia no quede marginada. Igualmente, IU vio respaldada su moción para animar a la Junta y a los pueblos de la provincia a recuperar las concesiones que las empresas hidroeléctricas poseen sobre las presas construidas en la provincia. Unos permisos cuya reversión implicaría "importantes beneficios" para la sociedad, tal y como recoge el informe realizado por el Observatorio de Sostenibilidad.

De igual modo, en un tono más político, los diputados hicieron piña para reclamar al Estado el arreglo del tramo de la A-66 entre Benavente y León, una moción ya presentada anteriormente por el Grupo Socialista que no había logrado los apoyos suficientes para salir adelante. De ahí que la diputada socialista Sandra Veleda se mostrara agradecida con cierto retintín al Grupo Popular por "esta vez sí" anteponer "los intereses de los ciudadanos a los partidistas" y respaldar su propuesta.

En la misma línea, con el fin de "despolitizar" la recuperación de los terrenos de Monte la Reina para uso militar, PP y Ciudadanos sumaron fuerzas para requerir la presencia del alcalde socialista de Toro, Tomás del Bien, en cualquier reunión que se celebre a partir de ahora para continuar con las negociaciones, una exigencia a la que tanto IU como PSOE se abstuvieron. Eso sí, la defensa de Del Bien no evitó la condena de los populares a las declaraciones de su homólogo en Valladolid, Óscar Puente, por priorizar las inversiones en la capital castellanoleonesa en detrimento del resto de ciudades de Castilla y León.

La declaración de "tolerancia cero" contra la violencia de género o la petición de apoyo del Gobierno estatal al Plan de Industrialización de Benavente también recibieron el visto bueno antes del debate creado en torno a la moción conjunta presentada por PP y Cs para reprobar las "cesiones" de Pedro Sánchez a los partidos independentistas.

Tras dos horas y media de mociones, el Pleno concluyó con los ruegos por parte de David Carrión para reiterar la necesidad de tomar medidas urgentes para paliar los daños producidos por el lobo y de Laura Rivera para velar por el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica en relación a los 33 pueblos de Zamora que aún poseen vestigios del franquismo y la restauración de la memoria de los 48 empleados públicos de la Diputación que fueron represaliados.