Mientras se expira el plazo de alegaciones y comienzan las obras para asegurar el inmueble, la rúa de los Notarios en el tramo que ocupa este edificio continúa parcialmente cortada. Una valla colocada en el lugar deja un espacio aproximado de tres metros para el tránsito de personas, frente a los cinco metros que tiene de anchura la calle en este punto. Eso no impide, no obstante, que los turistas y ciudadanos que durante estos días se acercan a la Catedral con motivo de las procesiones de Semana Santa puedan utilizar este camino como vía alternativa a la de la plaza de Arias Gonzalo y la calle de Obispo Manso.

El corte de esta calle, como ya es conocido, ha obligado a modificar hasta seis recorridos procesionales a las puertas de la semana de Pasión. Tres de ellos ya se han producido y los otros tres llegarán a lo largo de las próximas jornadas. El recorrido alternativo se toma por la rúa del Silencio, plaza de Arias Gonzalo, calle de Obispo Manso, plaza de Antonio del Águila y plaza de la Catedral.