El estruendo de cientos de motos sacudió a las 17.50 horas Castronuevo de los arcos para despedir a su amigo y colega de rutas, Óscar Sastre, tras la misa de funeral, arropado por el dolor silencioso de más de dos mil personas que ocupaban la iglesia, la plaza del templo y las calles adyacentes de su pueblo natal.

La guitarra y el violín, junto a las lágrimas y la emoción apenas contenida de su familia y sus amigos, despidieron a Óscar con los acordes de Leño y su "Maneras de vivir", un guiño a su nobleza y forma de ser y estar en el mundo, con una fuerte ovación de quienes abarrotaban el templo. Después fueron Celtas Cortos, "La senda del tiempo", y el clásico "No puedo vivir sin ti", de Los Ronaldos.

Su pareja, Ángela Tejero y su hermano, Rubén, dieron las gracias, como a Óscar le hubiera gustado, a quienes no faltaron a la última cita con el exsindicalista de CC OO y empresario zamorano, fallecido en Bemposta el viernes en accidente de moto, al invadir su carril una furgoneta. Entre los asistentes, la patronal de hostelería o el delegado de la Junta de Castilla y León. "Era un bien tío", subrayó el sacerdote en su homilía; "la que nos han liao", lamentaba entre lágrimas un amigo.

A las 18.00 horas, los amigos, muchos sobre sus motos, acompañaron a la familia hasta el cementerio, donde se depositaron las cenizas entre aplausos.