La Guardia Civil solo localizó a dos de los cuatro procesados por intento de robo de cable, distribuido en paquetes, de una serrería de Villanueva del Puente y el vehículo en el que supuestamente iban a cargar el material sustraído. En el interior del turismo hallaron numerosa herramienta que la Fiscalía sostiene que habrían usado para cortar la valla del recinto y que los imputados justificaron porque se dedican a la albañilería. Los imputados, tres varones y una mujer, explicaron su presencia en el negocio porque iban a llevar el currículum, si bien se trataba de un Miércoles Santo, el 27 de marzo de 2013, lo que resta credibilidad a su versión para la Fiscalía, que les exige ocho meses de prisión a cada uno y 2.640 euros por los daños causados. Las instalaciones estaban cerradas desde el día 23.

El dueño del aserradero, que ayer no compareció en el Juzgado de lo Penal (por lo que tendrá que pagar una multa de 300 euros), relató a la Guardia Civil que se vio sorprendido por los supuestos ladrones cuando ya habían forzado el armario eléctrico de la instalación y los cables arrancados y agrupados en diferentes sitios, dispuesto para llevárselo. Los procesados "salieron corriendo" al percatarse de que había alguien en el aserradero, contó el dueño a los guardias, declaró uno de ellos. Precisamente por ello, tiene mucho sentido", indicó el testigo, "que si iban a pedir trabajo se fueran" al toparse con el dueño.

Uno de los agentes se quedó custodiando a los dos acusados que encontraron fuera de las instalaciones, "que no eran del pueblo", mientras que "el propietario del coche", que estaba cerrado con llave, "llegó después" y tras él "un menor de edad y la chica", declaró el funcionario ayer en el juicio. En el turismo, un Ford Mondeo, había "un martillo encofrador, un cortafríos, una mazeta de obra, palaquetas y destornilladores". La Fiscalía sostiene que mientras tres de los procesados estaban dentro perpetrando el robo, un cuarto se encontraba fuera del recinto con el coche preparado para cargar el material y abandonar rápidamente la serrería.