Como ya hicieran en 2011, los populares van a prestar especial atención a los puestos de la candidatura donde se juegan la mayoría y la mayoría absoluta, es decir del 13 al 15.

En la última ocasión les salió bien al colocar en el ingrato 14 al veterano Ricardo Ferrero, que terminó atrayendo un buen puñado de votos suficiente para esa mayoría absoluta.

Para ello la organización tirará de los incondicionales del partido a los que no les importa exponer su nombre o quedarse sin acta de concejal con tal de arañar esos apoyos.

A la hora de optar por Clara San Damián como aspirante a la Alcaldía de Zamora ha pesado, señalan fuentes del partido, "su juventud, preparación y experiencia", ya que además de haber trabajado como funcionaria, ha desempeñado distintos cargos políticos hasta llegar a la Subdelegación del Gobierno, cargo que ostenta en la actualidad.

Y, por supuesto, "que de verdad quiera ser alcaldesa, algo con lo que está muy ilusionada". A San Damián se la considera una persona cercana capaz de empatizar con la ciudadanía, aunque tendrá que dar un giro de ciento ochenta grados a su hacer diario en la política al pasar de la Subdelegación al Ayuntamiento, a un frente de contacto diario con los zamoranos y con los problemas de la ciudad, que han crecido por la situación de crisis que padece el país desde el año 2007.