La caída del precio del barril de petróleo, y por consiguiente de sus productos derivados, ha conseguido que el invierno sea más llevadero para todos los zamoranos que calientan su vivienda gracias a una calefacción de gasoil. El combustible que se usa para mantener la caldera activa durante el invierno, gasóleo C, arrastra una rebaja de precios que ha abaratado su precio casi un 30% con respecto al año pasado.

A día de hoy el precio de litro de gasóleo C es de 0,664 euros aproximadamente, aunque hay diferencias entre los distribuidores -además, a este precio hay que sumar la manipulación y el transporte-. Esto se traduce en que un metro cúbico de gasóleo C, lo que equivale a mil litros, venga a costar aproximadamente 664 euros. Sin embargo, los distribuidores zamoranos consultados rebajan su precio al entorno de los 650 porque, dicen, en muchas ocasiones se ofrecen precios "especiales" asociados a las compras de grandes cantidades de combustible.

En las mismas fechas del año pasado, con el barril de petróleo a precios mucho más elevados que los actuales, el litro de gasóleo C venía a costar aproximadamente noventa céntimos. Es decir, en poco más de doce meses el importe que pagan los zamoranos por el combustible para sus calderas de calefacción se ha reducido en 30 céntimos por litro, casi trescientos euros en un depósito de un metro cúbico.

En Zamora capital la mayoría de las viviendas que utilizan este combustible lo hacen porque cuentan con calefacción central. En los pueblos su uso está más extendido, sobre todo en lugares donde no hay disponible gas natural.

Primera necesidad

Pese al descenso de precios, los productores aseguran que la demanda se mantiene en cifras estables en comparación con otros años. La explicación hay que buscarla en que el combustible para las calderas es un bien de primera necesidad para los zamoranos, algo indispensable para soportar las bajas temperaturas del invierno. En 2013, último ejercicio del que se disponen datos al conjunto, se despacharon 17.000 toneladas métricas, 5.000 más que en el año inmediatamente anterior. Eso sí, de momento, debido a las temperaturas inusualmente altas registradas en noviembre y parte de diciembre, no se ha llegado a las cifras del año pasado. El sector asegura que la caída no tiene nada que ver con la crisis y sí con las temperaturas.