El secretario asegura que el coto tiene todos los papeles en regla: los seguros suscritos, la formación del acotado está vigente hasta 2024, aprobada por la Junta de Castilla y León, así como el plan cinegético, renovado el pasado año y válido hasta 2018. García cree que esta denuncia la puede estar promoviendo Gabriel Sacristán, porque solicitó entrar en el coto, pero no le dejaron porque no cumplía los requisitos establecidos. "Nos mandó una carta, no de forma oficial ni directamente a la directiva, sino por mediación de un socio, en la que venía a decir que entendía de leyes y que había algunas cosas que según su criterio no estaban bien. Si le dejábamos entrar se olvidaba del tema y si no iba para adelante y nos iba a cerrar el coto". El directivo, cuya versión coincide con la de otros miembros del coto, asegura que ningún propietario ha intentado hablar con ellos o mantener ninguna reunión para abordar los posibles problemas y denuncia que han desaparecido más de la mitad de las tablillas indicativas colocadas este verano.