El trágico fallecimiento de la psicóloga Violeta Guarido Rivera recuerda, en cierto modo, a la violenta muerte de la educadora zamorana de Mensajeros de la Paz Auxiliadora Vázquez, de 26 años. En aquella ocasión, 4 de marzo de 2003, el joven marroquí Abdelhuajed Fatdar, de 19 años, acabó con la vida de la vecina del barrio de Los Bloques estrangulándola, tras lo cual ocultó el cuerpo sin vida en el semisótano de la residencia, antiguo edificio de la avenida Requejo que acaba de ser demolido hace escasas fechas.

La naturaleza del suceso provocó entonces un fuerte impacto en Zamora. Tras asesinar a la educadora, el joven marroquí se dio a la fuga, apuñaló a un taxista y huyó en el vehículo con el que se estrellaría más tarde, circunstancia que permitió su detención por parte de la Policía. El asesino de la joven zamorana no solo confesó el crimen, sino que también reconoció haber acabado días antes con la vida de un sacerdote de la provincia de Salamanca.