Si el mercado de alquiler de plazas de aparcamiento vive en estos meses una de los mayores índices de actividad que ha habido en este campo, el caso de la compra y venta de este tipo de propiedades se encuentra más bien estancado, al igual que ocurre con la oferta inmobiliaria en general, rebajada a niveles muy bajos.

No obstante, muchos de los que hoy quieren alquilar una plaza de garaje no se atreven a venderla «porque nunca se sabe lo que pasará en el futuro y si la vamos a necesitar», como apunta Sara de Diego. Además, visto el poco movimiento por parte de los posibles clientes en el mercado de alquiler, todo hace prever que una oferta de compraventa no tendría grandes resultados hoy en día. «Arrendarla ya es difícil, pero si la gente tiene que gastarse el dinero en comprarla (el precio ronda los 18.000 euros) muchos optarían por dejar el coche en la calle», afirma Salobral.