En el curso que se inaugura el próximo lunes los centros de Perilla de Castro, Tagarabuena, Pueblica de Valverde, Cubillos y Pino del Oro no abrirán sus puertas, ya que no llegan a los cuatro alumnos en Infantil y Primaria que cómo mínimo han de reunir para ofertar los cursos. Así lo ha confirmado el propio delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, que señaló que «está todo preparado» para que nada falle en los 108 centros educativos con los que cuenta la capital y la provincia, de los que once son concertados.

Los alumnos cuya escuela no puede impartir clase tienen que desplazarse a su centro de referencia en una de las 196 rutas escolares que se despliegan por toda la provincia, y que este año aumentan en cuatro con respecto al curso anterior.

Por el contrario, los alumnos y profesores de Morales del Vino podrán disfrutar este año del nuevo centro escolar, que a falta de los últimos retoques, «podrá recibir a los niños con las obras finalizadas», confirma el delegado.

La lucha contra el absentismo escolar se prepara también en el nuevo curso para, gracias a la figura «clave» del profesor técnico de Servicios a la Comunidad, evitar que los menores falten a clase. El curso pasado el número de casos se elevó a los 305, la mayoría pertenecientes a minorías étnicas e inmigrantes. La etapa más castigada es la ESO, que aglutina más de la mitad de los casos.

Este curso las aulas zamoranas cuentan con 513 alumnos inmigrantes y 18 profesores de apoyo que ayudan a los menores a mejorar su castellano.