El número de matanzas domiciliarias llevadas a cabo en la provincia de Zamora durante la pasada campaña 2008-2009 descendió con respecto a temporadas anteriores. El Servicio Territorial de Sanidad de la Junta de Castilla y León ha constatado que "la cifra de sacrificios domiciliarios, las tradicionales matanzas, disminuye año tras año", según señaló hoy la Delegación de la Junta en Zamora.

Durante la campaña 2008-2009, los veterinarios, oficiales y colaboradores, analizaron en la provincia zamorana un total de 5.375 cerdos, lo que supone una disminución de 124 animales con respecto a la campaña 2007-2008. En relación con la temporada 1999-2000, durante la cual analizaron 14.989 animales, el número de pruebas realizadas ha disminuido casi un 64 por ciento. "Esta mengua generalizada se debe fundamentalmente al cambio de los hábitos alimenticios de la población. Además, las matanzas se circunscriben casi exclusivamente al ámbito rural cada vez más despoblado y más envejecido", apuntaron las mismas fuentes.

Las tareas del control sanitario derivadas de las matanzas en domicilios particulares las llevan a cabo veterinarios oficiales de la Consejería de Sanidad, a los que se suma la participación voluntaria de veterinarios colaboradores previa solicitud al jefe del Servicio Territorial de Sanidad. El número de estos fue de 37 para 128 municipios de la provincia en la campaña 2008-2009. "Las carnes y sus derivados del sacrificio domiciliario solamente pueden destinarse al consumo familiar, ya que su comercialización está prohibida", subrayó la Junta.

Por lo que se refiere a animales abatidos en cacerías y que también son objeto de control, en la campaña 2008-2009 los veterinarios analizaron 223 jabalíes y un ciervo y en la de 2007-2008, 219 jabalíes.