Desde sopa de pescado hasta ternera sin pasar por altos los tradicionales turrones degustaron 55 personas en la ya tradicional cena de Nochebuena, organizada por la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil Local de Zamora desde hace varias décadas.

Los preparativos comenzaron ya el día anterior con la decoración con motivos navideños de un salón del colegio Corazón de María. Más tarde llegó el turno de la recogida de los alimentos con los distintos establecimientos, panaderías y restaurantes colaboradores «una treintena, y casi el doble que el anterior año», según indicó David Vega, jefe de los voluntarios de Protección Civil.

Los grandes protagonistas, las 55 personas desfavorecidas o sin familia que usualmente cenan en comedores sociales, compartieron mantel la víspera de Navidad «como una gran familia, porque hay algunos que han venido muchos años y ya nos conocemos», sentenció Vega. Entre ellos incluso se encontraba una familia con un niño de diez años que cumplía ese día 10 años y al que cantaron el cumpleaños feliz.

La bendición del Padre Basilio y la visita de autoridades locales supusieron el preámbulo de la cena formada por entremeses, varios primeros y segundos así como un poste a base de pasteles y dulces navideños. «A partir del segundo planto, los voluntarios entonaron villancicos que «llevábamos ensayando más de un mes», aseguró Vega que indicó que colaboraron 15 voluntarios de Protección Civil y otras 15 personas a título particular.

Desde Protección Civil concretan que las previsiones apuntaban a unas 70 asistentes y «sin embargo sólo acudieron 55 lo que es positivo, porque se supone que los restantes han pasado la Nochebuena con un familiar o con algún amigo», se congratuló Vega que indicó que la comida sobrante la entregaron ayer al Hogar de la Paz y los comensales «recibieron una bolsa con dulces navideños».