“No tiene nada que ver el tratamiento que le dieron a la vecina o a la prima cuando tuvo cáncer de mama con el que me van a dar a mi, porque depende de muchos factores, y el tratamiento está hecho a la medida de la paciente”. Es lo que dijo la ginecóloga del Complejo Asistencial de Zamora, Inmaculada Herrador García en las Jornadas de Infosalud organizadas por la Fundación Científica Caja Rural de Zamora en colaboración con la Asociación Zamorana de Ayuda Frente al Cáncer Azayca.

Herrador explicó el funcionamiento de la unidad de patología mamaria, desde que llega un caso sospechoso porque la mujer se note un nódulo, úlcera, cambio en el tejido mamario y derivada por el médico de cabecera, desde Radiología por una mamografía sospechosa o desde la unidad de diagnóstico rápido de Medicina Interna.

En la consulta se hacen las exploraciones, se piden las pruebas necesarias hasta llegar a un diagnóstico de cáncer de mama. Se recopila información del estadío en el que está, la edad de la paciente y el subtipo de cáncer y cada caso se analiza en el comité de oncólogos, anatomopatólogos, ginecólogos, cirujanos, radiólogos y radioterapeutas, donde se decide el tratamiento más adecuado.

Resistencias

La investigadora del Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca, Elena Díaz Rodríguez explicó que los nuevos tratamientos pasan por la búsqueda de “dianas terapéuticas que podamos utilizar para diseñar fármacos. Estamos buscando fármacos que sean más eficientes y menos tóxicos. Y por otro lado estamos aplicando otros tratamientos, como la inmunoterapia que hasta ahora no se habían aplicado en cáncer de mama. Son los retos que tenemos, aparte de entender por qué se producen las resistencias a las terapias que tenemos ya disponibles”.

Díaz indicó que “el cáncer de mama de cada paciente va a ser único porque va a tener unas alteraciones únicas. Por eso hablamos de medicina personalizada”. Aunque las terapias actuales son eficaces y más del 90% de las pacientes de cáncer de mama están “curadas o con la enfermedad cronificada”, hay algunos cánceres “resistentes, que no responden como esperamos” , y el peligro principal son las metástasis, las células cancerosas que llegan a otros órganos porque son las que comprometen la vida de la paciente.

“Son el gran caballo de batalla aunque vamos avanzando en el tratamiento de las metástasis”, explica la investigadora. En general los nuevos fármacos, aunque muy caros, “si hacen falta sí se utilizan en España”. Otra cosa es que algún fármaco aprobado en Estados Unidos hace un año, aún no esté aprobado para su utilización en Europa.