El 4 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Ingeniería para el Desarrollo Sostenible y la Escuela Politécnica Superior —junto a la Universidad de Salamanca— se une a esta celebración con diferentes actividades que se resumen estos días en una exposición en el hall del edificio principal.
El germen de esta propuesta viene de la mano de un equipo de docentes capitaneados por la profesora Ana Belén Ramos Gavilán, que ha estado acompañada por Aitor Raposeiras, Diana Movilla, Míriam Hernández, Ana Belén González, María Ascensión Rodríguez, Isabel Revilla, María Almudena Frechilla y Ana María Vivar.
Todos los trabajos que se muestran en esta exposición “han sido elaborados por alumnos y alumnas de los grados de Ingeniería Mecánica, Ingeniería Civil, Ingeniería Informática en Sistemas de la Información, Ingeniería Agroalimentaria y Arquitectura Técnica”, enumera Ramos, coordinadora de esta iniciativa. Estas propuestas analizan el potencial de las distintas ramas de la ingeniería en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Desde 2020
La Unesco promovió recientemente esta celebración —que se inició en el año 2020— para tratar de concienciar sobre la contribución de la ingeniería en el bienestar de la humanidad, destacando su importancia para mitigar los efectos del cambio climático y avanzar en el desarrollo sostenible.
Para este 2022 el tema de la celebración es “Reconstruir más sabiamente. La ingeniería del futuro”, lema con el que se pretende “reconocer la importancia de la ingeniería para asegurar un futuro mejor. Un futuro en el que ingenieros e ingenieras deben pensar de forma holística e ir más allá de los factores tradicionales de la ingeniería, como la calidad, el coste o el tiempo”, explica la docente, que añade para esta ocasión “el impacto medioambiental, social y humano”, subraya, al tiempo que reconoce que la ingeniería sostenible es el futuro. “Los alumnos tienen que ver este cambio, esa utilidad social de la que no se hablaba hace pocos años”, añade.
“Se trata de una jornada a nivel mundial donde los ingenieros e ingenieras están invitados a ofrecer propuestas en materia de alimentación, energía, medio ambiente, agua, ciudades sostenibles, resiliencia ante los desastres naturales o crecimiento económico e igualdad de género”, pone como ejemplos la profesora de la Politécnica.
La USAL concedió este curso a la escuela del Campus Viriato de Zamora este proyecto transversal para poder formar a los alumnos en ingeniería sostenible, por lo que durante todo este semestre se está trabajando para favorecer el compromiso de los estudiantes con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Ingeniería y arquitectura
Este proyecto de innovación y mejorar docente se está desarrollando con un total de 130 estudiantes de ingeniería y arquitectura. “En este tiempo, los estudiantes han podido conocer la Agenda 2030, identificar las metas e indicadores de los objetivos de desarrollo sostenible, analizando la importancia de la ingeniería y la arquitectura en la consecución de los mismos”, resume.
Con esta exposición de paneles elaborados por los propios alumnos a raíz de sus propuestas en el aula y con la celebración del Día Mundial de la Ingeniería se clausura este curso de formación del primer semestre, “que ya tiene una segunda edición en marcha”, afirma satisfecha la profesora Ana Belén Ramos.
