Incentivos económicos, de carrera profesional y de conciliación. Esas son tres de las patas sobre las que se sustenta la estrategia de la Junta de Castilla y León para evitar que los concursos de traslados de los profesionales sanitarios sigan diezmando la complicada prestación del servicio en el medio rural. La cuarta pata sería la inclusión de los médicos residentes en la rueda de los pueblos, de manera que las rotaciones de Familia se alejen de los hospitales y centros de salud urbanos para viajar también a los pequeños núcleos urbanos.

El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha mostrado su preocupación por la situación en la que se queda la provincia de Zamora tras este concurso de traslados, en el que 21 médicos han pedido cambiar de destino. “Tenemos que trabajar de un modo intenso y una de las medidas que debemos tomar es que los residentes cumplan parte de su formación dentro del medio rural, porque no puedes amar algo que no conoces”, ha expresado.

A ello, el titular de Sanidad ha añadido medidas de índole económico y de carrera profesional. “Hay que incentivar a estos profesionales de alguna manera y tenemos que estudiar todas las posibilidades”, ha indicado.