Con la fachada del Ayuntamiento teñida de morado, el color de la lucha feminista, cerca de 200 zamoranos se concentraron en la Plaza Mayor para participar en el último de los actos programados con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.

En el manifiesto leído por representantes del movimiento feminista Trece Rosas de Zamora, se recalcó el peligro de negar que esta realidad existe, aludiendo a los últimos datos del Barómetro Juventud y Género 2021, “que desvelan que uno de cada cinco jóvenes varones creen que la violencia machista no existe y que es solo un invento ideológico”, subrayaron. “El negacionismo de la violencia machista que la ultraderecha pretende instalar en nuestro país es también una forma de violencia contra las mujeres ejercida por los hombres”, añadieron.

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GALERÍA | Concentración por el 25N en Zamora Emilio Fraile

Con más datos argumentaron la crudeza de esta lacra, como que una de cada dos mujeres en España de más de 16 años ha sufrido algún tipo de violencia machista a lo largo de su vida o que el 14% de las mujeres ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de sus parejas, a lo que hay que añadir que, en el caso de las violaciones, se registran una media de seis diarias.

A poco más de un mes para que finalice el año, ya se registran 24 huérfanos por terrorismo machista. “La violencia vicaria es una de las formas más crueles de violencia contra las mujeres y al no estar recogida por las comunidades autónomas y la Administración General del Estado, su inclusión en la ley no ha tenido efectos reales”, apuntaron.

Tras describir la situación actual, desde la plataforma señalaron las exigencias que ponen sobre la mesa, como la puesta en marcha de medidas para la independencia económica de las mujeres maltratadas, “así como un acuerdo entre la administración pública, los agentes sociales y las empresas para garantizar su seguridad sin que sufran menoscabo en sus derechos laborales”.

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También subrayaron la necesidad de una reforma de un sistema judicial “que revictimiza a las mujeres”. Por ello, apuntaron que es necesario “crear nuevos juzgados especializados en violencia machista en todas sus instancias, con formación obligatoria para todo el personal que actúe en ellos”.

La prostitución también tuvo cabida en sus reivindicaciones. “Denunciamos que el Estado permita que se explote a las mujeres sexualmente”, señalaron, solicitando “una ley abolicionista del sistema prostitucional, donde la prostitución sea reconocida como terrorismo machista, que persiga la proxeneta y sancione al putero”, propusieron. El manifiesto también habló de los vientres de alquiler, de la coeducación o de la reforma de la Ley de Salud Sexual para seguir avanzando hacia la igualdad.