Agradecida pero sobre todo perpleja. Así se siente la artista zamorana Soledad Luna, que reside en Santa Clara de Avedillo, por la repentina y desbordante popularidad que le ha aportado su participación en el programa de televisión La Voz Senior, emitido el pasado viernes, pero grabado hace más de un año. No se le sube a la cabeza el aluvión de elogios que recibió por parte de los coaches tras su potente actuación y critica sin tapujos los entresijos que no se ven a través de la pantalla.

–¿Cómo está viviendo la oportunidad que le ha brindado el programa La Voz Senior?

–Ha sido algo que en mi vida me habría imaginado. Voy a cumplir 40 años de trayectoria y no me imaginé que tanta gente me fuera a descubrir ahora, como si fuera una novata o hubiera ganado Eurovisión. Ha sido desbordante, pero no entiendo que una actuación de minuto y medio que dura la canción se haya magnificado tanto. Desde que se empezó a anunciar hasta que se ha emitido el programa, he recibido cientos de whatsapp y, por lo visto, he tenido muchísimas visualizaciones en youtube. Creí que me iba a costar la salud. Al final me voy a ir al Sáhara y que me cambien por un camello.

–¿No se esperaba tanta repercusión?

–Esto no se lo podía esperar nadie, que algo tan simple tuviera tanta repercusión era impensable. Yo he hecho mucha televisión. Hice 15 programas con Concha Velasco en Querida Concha, con Esmeralda Marugán en Castilla y León también trabajé mucho y con Televisión Zamora he colaborado y colaboro mucho. No entiendo por qué la gente me ve como alguien diferente cuando soy la misma de siempre. Se han comportado como si fuera una niñata de Zamora, que he empezado a cantar en un karaoke y me dan esta oportunidad. Ni que hubiera ganado Eurovisión, solo he participado en un programa. He tenido la suerte de que me valoraran mi trabajo, pero a mí mi padre me enseñó a mejorar cada día a lo que me dedicara en la vida y que fuera una persona que no tuviera que agachar la cabeza. Lo que he hecho es hacer lo mejor posible mi trabajo y nada más.

–¿No agradece recibir este reconocimiento, aunque llegue tarde?

–Estoy agradecida porque por fin mucha gente se da cuenta de quien soy. Parece que en este país solo cantan Rocío Jurado e Isabel Pantoja. Yo me he preparado mucho, tuve un profesor de canto en Valladolid, también he recibido clases de baile y de dicción. Cantar no significa solo tener voz, para seguir subiendo escalones hay que tener otro tipo de conocimientos que son los que te hacen ser artista. Hay cantantes, cantontos y artistas. Yo no voy a decir que soy artista porque en este país ser artista es ser una persona que destaca mucho y que gana mucho dinero. Hay que demostrarlo en el escenario. Desde que se inventaron los karaokes salen artistas de debajo de las piedras. La gente es analfabeta al oído y aunque se cante un fandango como si fuera una muñeira, la gente se pone de pie a aplaudir.

–¿Como sienta la lluvia de elogios recibida por artistas de la talla de Antonio Orozco, Pastora Soler, Rosana y David Bustamante?

–Yo participé hace muchos años en el programa Gente Joven y me di cuenta del engaño que hicieron conmigo. Los que dan la cara son los que tienen un guión aprendido y hacen lo que le digan por el pinganillo. Yo puedo entender que se puedan entusiasmar al ver la diferencia entre alguien que canta por primera vez en público y una profesional. No es que yo sea mejor, sino que la experiencia marca la diferencia. Nunca he ido de artista por la vida, ni me he creído todas estas cosas sobreactuadas. No se me cae la baba, sino que creo que han cumplido con su papel, aunque hay una pequeña dosis de que les ha gustado. Yo estuve en plató 17 minutos y han emitido solo ocho y eso me ha desilusionado un poco.

–¿Qué expectativas tiene tras su participación en esta edición de la Voz Senior?

–Lo que he conseguido es participar en un programa que se ha convertido en una ventana publicitaria para mi trabajo a nivel nacional y que espero que me incremente la agenda de trabajo. Lo he logrado saliendo solo en el primer programa y lo que te puedo adelantar es que cuando la gente me vea en el siguiente programa no se imaginan el cambio de visualización que van a tener, van a tener un punto de vista del programa totalmente diferente. No te puedo decir nada más, ya lo entenderéis al ver el próximo programa.

–Al final se decantó por el equipo de David Bustamante, ¿qué le hizo tomar esta decisión?

–Yo iba de cabeza con Pastora Soler. Cuando salí al plato y vi que su butaca estaba girada porque ya tenía el equipo completo me vine abajo y quería salir corriendo. A Orozco lo vi sobreactuado y como he vivido 13 años en Castro Urdiales hice lo que se me ocurrió en ese momento. Al no poder elegir a Pastora Soler me daban igual cualquiera de los demás porque para mí Pastora Soler es la mejor voz de España, la admiro mucho. Hace un año que grabé el programa y no he vuelto a saber nada de Bustamante, por eso creo que es todo una sobreactuación y puro escaparate.

–¿Cómo ha sido el proceso de preparación y de castings antes de grabar el programa?

–La gente me ha visto cantar un minuto y medio, pero he tardado seis meses en llegar ahí, en poderlo grabar. Antes tienes que pasar por cástings, entrevistas, grabaciones, preparaciones…. Tampoco te dejan elegir la canción. Yo quería cantar por Marifé de Triana, pero te obligan a cantar lo que ellos te dicen. Ha sido un ir y venir constante, no sólo para mí, sino de mis acompañantes desde Zamora y Valladolid. Ha sido un peregrinaje de seis meses hasta poder grabar el programa. Ellos te pagan el hotel de los dos programas que grabé, pero el resto de los viajes te los pagas tú y en el primer programa yo salgo vestida y maquillada por mí. Grabé a las 8 de la tarde cuando me había maquillado a las 9 de la mañana, sin poder rectificar el maquillaje ni nada. Todo eso no lo sabe la gente, por eso yo no puedo compartir el entusiasmo exagerado de la gente porque solo han visto la parte del escaparate, pero no todo el trabajo, tesón y sacrificio que conlleva. Hay muchísima gente a la que criban. Sales de casa a las 8 de la mañana y vuelves a las 5 de la madrugada. También valoran como te desenvuelves en las entrevistas y yo soy muy locuaz pero a lo mejor vende más la mochila de victimismo, de la pena. Por eso yo creo que todo esto se ha desbordado de una manera que no entiendo. No entiendo ese entusiasmo de la gente

–Siempre ha llevado Zamora por bandera, ¿se siente orgullosa de sus orígenes?

–Me tira mucho Andalucía, pero mi tierra, mis raíces y mi gente van siempre por delante. De hecho fíjate si me tiran mis raíces que vivo en Santa Clara de Avedillo desde hace doce años y espero que mis días acaben aquí. Odio las prisas y los coches de las grandes ciudades. Yo necesito la paz del guerrero. A mí me dan ahora mismo un chalé de oro en la mejor ciudad del mundo y no lo quiero. En este pueblo, que somos 160 habitantes, salgo a la puerta y me saludo con todo el mundo. No porque sea cantante me quieran más, ven que soy normal, como ellos. Que abras la ventana y escuches los pájaros no lo cambio por nada.

Pincha aquí si quieres ver cómo fue la actuación de la cantante con la que ha sido seleccionada para concursar en La Voz Senior.