“Como un regalo”. Así afronta el grupo Vandalia Trío su próximo concierto en la capital, que tendrá lugar el jueves 27 de agosto en la plaza de la Catedral, a las 22.00 horas de la noche. El espectáculo será la presentación del último disco del conjunto, “Gen”, que salió a la luz el pasado 13 de marzo, justo un día antes de la declaración del estado de alarma. Los planes iniciales de la formación eran “empezar una gira para darlo a conocer entre marzo y julio, pero se canceló debido a la pandemia”, relata Irene Jiménez Lizcano, flautista en Vandalia Trío. El disco “es una fusión entre música clásica y otros estilos como jazz, rock o funk”, comenta Pablo Estébanez Blanco, cuyo instrumento es el contrabajo.

La agrupación expondrá ante los zamoranos los temas de su último trabajo, “piezas originales nuestras en las que nos estrenamos como compositores”, explica Jiménez. La noche vendrá cargada de sorpresas, pues el trío ha volcado sus esfuerzos para lograr una puesta en escena muy especial, en la que se proyectarán imágenes con movimiento en la pared de la Catedral. En el álbum físico, estas ilustraciones, del artista sevillano Óscar Romero, aparecen estáticas, y cada una de ellas está inspirada en una canción concreta. Para el directo, las imágenes estarán animadas y serán un recorrido por cada uno de los temas, a los que acompañarán visualmente.

Además, el disco contiene algunas piezas en las que se ha introducido percusión, y el jueves, será el zamorano Jaime Álvarez el encargado de sorprender a los presentes con la batería, que se fusionará con el sonido de Vandalia Trío. Con todo esto, “no queremos un concierto donde salgamos a tocar y nada más, sino que sea un show”, apunta Fernando García Calvo, violinista del grupo, aunque también toca otros instrumentos.

A pesar de la pandemia, Vandalia Trío ha podido actuar este verano en otras ocasiones, principalmente en Andalucía y siempre al aire libre, “hemos tenido mucha suerte, porque nuestra formación no supone muchos problemas para manejarnos en el escenario y mantener las medidas de seguridad entre artistas y con el público”, indica Jiménez. Además, “hemos hecho casi más conciertos que en agosto del año pasado, algo que también se debe a nuestra actitud, siempre positiva y con la ilusión de querer trabajar y tocar el disco nuevo, pues pensamos que se pueden hacer actuaciones siempre que se cumplan unas condiciones, y la gente debe entender la diferencia entre ser precavidos y tener miedo”, señala García Calvo. Aunque el número de espectadores ha sido más reducido que en condiciones normales, “la gente siempre se lo ha pasado bien, ha colaborado y se han cumplido todas las medidas de seguridad, por lo que estamos muy contentos”, afirma Irene Jiménez.

Este jueves, será la primera vez que el grupo presente su álbum “de principio a fin y en un orden específico, puesto que en el resto de conciertos de este verano, los hemos mezclado con otros temas”, comenta la componente del grupo. La oportunidad llega de la mano del Ayuntamiento y la Diputación de Zamora, “que nos han ayudado a que podamos realizar el concierto en la plaza de la Catedral, y se encargarán de que este sea seguro y se cumplan todas las medidas sanitarias”, indican los miembros del grupo. Para la formación, la noche del jueves “es un regalo, no esperábamos que este verano pudiera ser fructífero profesionalmente, y contra todo pronóstico, hemos trabajado mucho y hemos compartido muchas cosas; el concierto en Zamora representa todo el apoyo de esta ciudad que hemos tenido siempre”, añade Jiménez. En palabras de Fernando García, “este espectáculo significa mucho para nosotros, porque tanto Pablo como yo somos de Zamora y esta ciudad nos ha ayudado mucho a sacar el disco con el crowfunding; lo vamos a dar todo y tenemos muchísima ilusión después de haber estado parados”.

En esta ocasión, el aforo se ha reducido a unas 400 personas. Las entradas están disponibles en la web eventbrite.es, o en puntos de venta físicos: la librería Semuret (calle de Ramos Carrión, 21) y La Cueva del Jazz (calle Puerta Nueva, 30). Los pases tienen un precio de ocho euros, si se adquieren de forma anticipada, y de diez euros, si se compran en taquilla. Con el espectáculo del jueves, Vandalia Trío no da por terminados sus conciertos estivales, y un día después, el grupo llevará sus canciones a Valladolid. “Aunque nos ha costado seguir adelante, estamos buscando fechas para continuar con la gira y poder reubicar los espectáculos”, señala Pablo Estébanez.Tras el parón del confinamiento, el grupo Vandalia Trío vuelve a la carga el próximo 27 de agosto, en la plaza de la Catedral, con un concierto que servirá como presentación de su último trabajo, titulado “Gen”. El conjunto no había tenido ocasión de dar a conocer el álbum en directo anteriormente, pues salió el 13 de marzo, justo un día antes del estado de alarma.