David Movilla no tiene ninguna duda. El CD Badajoz tiene mejores mimbres, a día de hoy, que el Zamora CF. Es un equipo de tremenda calidad, un proyecto creado para ascender y son el gran favorito de la eliminatoria que ambos equipos disputarán en Almendralejo este domingo. Sin embargo, ni el vasco ni ninguno de sus hombres está dispuesto a tirar la toalla sin haber combativo ni aceptar ese orden establecido sin que quede comprobación del mismo. Por ello, Movilla señaló ayer que en el vestuario rojiblanco “se acepta” esa realidad pero “eso no significa que el equipo se resigne a ella”. Todo lo contrario, el Zamora CF tratará de “rebelarse como lo ha hecho toda la temporada” ante otros equipos de también gran potencial como el Deportivo de la Coruña, el Compostela o la Cultural Leonesa.

La realidad es la que es y David Movilla no es ciego para no verla. De hecho, ayer relató varios de los datos que sustentan el papel de favorito de un CD Badajoz creado para ascender. “Han sumado 54 puntos que, en un formato normal de temporada regular, significa que habrían logrado 85 puntos. Únicamente han perdido dos partidos, uno en inferioridad numérica desde el minuto 45 y otro en el que jugó ya clasificado con sus hombres menos habituales. La proyección de goles encajados en una temporada normal sería de entorno a los 21 tantos...”, comentó el entrenador del Zamora CF ayer, enumerando las estadísticas de un rival cuyo talento se refleja en una fase bien simple: “Berri, fundamental en el Celta B, era suplente el pasado año allí”. Y la afición zamorana sabe bien como se las gasta el filial vigués.

En el CD Badajoz no solo hay buenos jugadores, “son un grupo competitivo y optimizado” pero todo eso no asusta al Zamora CF ni a Movilla. Todo lo contrario, les motiva porque permite al vestuario rojiblanco “afrontar el reto de rendir a un nivel de excelencia máximo que nunca ha alcanzado” el plantel zamorano, cuyo primer objetivo es “tratar de conectarse con su mejor versión” lo que “ha veces ha sido suficiente y otras no”, si bien siempre llevó a su afición a sentir orgullo por los suyos al final del encuentro.

El técnico apeló a la “cultura del trabajo” y la máxima de “poner el grupo por encima del individuo” que siempre han imperado en su vestuario para tratar de equilibrar fuerzas el domingo. “Al igual que nuestra afición, con la que nuestra conexión es clave para vibrar alto, tendremos que multiplicarnos si queremos alargar la eliminatoria lo máximo posible”, afirmó Movilla, sabiendo que para ello no valdrán artificios. “No vamos a hacer nada novedoso ahora, no vamos a cambiar”, confesó el vasco, asegurando que su equipo apostará por ser el mismo de domingos anteriores, tratando de ser ese equipo que siempre ha querido ser sabiendo que si bien el CD Badajoz “en liga podrían estar 30 puntos por encima”, en una eliminatoria “a un único encuentro, todo puede pasar”.

Un choque para el que podría no estar disponible, según afirmó ayer David Movilla, el central Adrián Crespo. “Sufre un esguince de rodilla y, seguramente, no podrá ser de la plantilla”, señaló, afirmando que si bien Adri Herrera “no está para competir al nivel que exige el choque de Almendralejo”, no solo cuenta ya con el alta médica, sino que también se encuentra entrenando con el grupo.