El Zamora C. F. afronta este domingo una verdadera final y es que después de sumar solo un punto de los últimos 18 puestos en juego, el equipo no puede pensar en otra cosa que no sea la victoria ante un Marino de Luanco que es colista, casi desahuciado, pero que se ha reforzado para este segundo acto de la competición y que llegará con menos presión que los zamoranos. El técnico del Marino, Marco Díaz, ya tiene a su disposición a los hombres con los que intentará buscar el milagro de la salvación, o, cuando menos, competir a un buen nivel en los 14 partidos que restan para concluir la temporada. Los azulones cierran la tabla con 13 puntos, a 13 también de la promoción de descenso (Astorga) y a uno más de la salvación (Zamora), rival que le espera en el Ruta de la Plata y para el que este encuentro también es una verdadera final. El punta brasileño Diogo ha sido el último en llegar y ya se entrena con sus nuevos compañeros.

El cambio en las filas del conjunto luanquín fue muy significativo en el mercado de invierno, con la incorporación de siete nuevos jugadores y la marcha de otros nueve respecto a los que empezaron la pretemporada a mediados con julio con José Luis Quirós como técnico.

La mayor parte de las incorporaciones, tres, son delanteros. Salvador Alegre Delgado, Boro, gaditano de Puerto Real, es media punta, tiene 23 años, procede del Conil (Tercera División) después de pasar por el Mérida, con el que perdió en el play off de ascenso ante el Langreo, y debutó el pasado domingo contra el Astorga dejando buenas sensaciones. En teoría debe de ser el sustituto de Fran Pastor, que se fue al Guijuelo. El malí Babá Draman Konare (19 años) llega cedido hasta final de temporada del Alcorcón (Segunda división). Es un jugador que estuvo a prueba durante varias semanas y que finalmente convenció a los técnicos del conjunto azulón. Debutó en la derrota de Murcia (2-1) al sustituir a Yeo en el minuto 70, y volvió a tener media hora el pasado domingo frente al Astorga al salir por Boro. Y el brasileño Diogo (24 años), con pasaporte italiano, es delantero centro y llega desde el Mosta, de la Primera de Malta.

Abraham Albarrán (31 años) llega cedido por el Real Avilés y es un hombre de contrastada experiencia en la categoría de bronce, tanto en el conjunto avilesino como con el Caudal a finales de la pasada temporada. Abraham llegó a Miramar hace dos semanas y jugó todos los minutos en los dos partidos, frente al Murcia y el domingo ante el Astorga. Su posición natural es la banda izquierda, aunque puede jugar por dentro.

Andrés Cabranes (18 años) es defensa y está cedido por el Sporting. El también defensa Adrián Rodrígues (26 años) es internacional con Andorra y llega del Salmantino (Tercera). Y Álex Blanco afronta una nueva etapa en el club tras fichar en enero después de hacer la pretemporada.