El papa Francisco dio su quinta misa de Gallo como pontífice la noche de ayer, a la que acudieron cerca de 10.000 personas. El papa ha querido recordar a aquellos que han sido “expulsados de su tierra”, comparando su situación con la de María y José, y ha pedido que se “abran los ojos ante el que sufre”. La misa, que comenzó pasadas las 21 horas, se inició con la “Kalenda”, el tradicional canto en latín que anuncia la llegada de la Navidad para los católicos. Hoy, el pontífice se asomará al balcón central de la basílica de San Pedro a las 12:00 horas para dar la bendición “Urbi et Orbi”.