Con dos atentados en tan solo dos días, el terrorismo islamista ha vuelto a golpear a Rusia: el objetivo del segundo atentado ha sido un trolebús que circulaba por la en la ciudad de Volvogrado. Un ataque, que ha dejado 10 víctimas mortales y que se ha producido en la misma ciudad donde ayer explosionaba una bomba en una estación de tren. En ese caso fallecieron 16 personas. La policía culpa a una de las llamadas "viudas negras", mujeres que buscan vengar la muerte de sus maridos, terroristas del Caúcauso enfrentados a Moscú.