El Consejo Comarcal de Toro recibirá este año una ayuda de 732.554 euros en el marco del Programa de Fomento del Empleo Agrario, 33.949 euros más que en la pasada convocatoria.
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha presidido este lunes la comisión autonómica de seguimiento del Programa de Fomento del Empleo Agrario dotado este año con cinco millones de euros, que se repartirán entre 125 municipios de la región, con el objetivo de que sus ayuntamientos puedan contratar a temporeros agrarios.
Por tanto, la partida destinada al programa se incrementa este año un 5% respecto al ejercicio anterior, lo que demuestra, según Barcones, “la apuesta decidida del Gobierno por defender el empleo en nuestros pueblos”, en este caso, el de trabajadores eventuales agrarios por cuenta ajena.
En el caso del Consejo Comarcal de Empleo de Toro serán contratados temporeros agrarios para realizar obras de interés general, mejoras urbanísticas o dotacionales en sus municipios y completar así sus ingresos, sin necesidad de buscar empleo en otros lugares.
La reunión celebrada este lunes ha servido para ratificar por unanimidad la distribución provincial del crédito para 2022 con el que contarán las cuatro provincias de Castilla y León incluidas en el programa: Zamora, Ávila, Salamanca y Valladolid.
La ayuda que recibirá el Consejo Comarcal de Toro asciende a casi 733.000 euros, mientras que Ávila recibirá 1,6 millones de euros; Salamanca 1,5 millones de euros y otro millón será destinado a Valladolid.
La distribución de las ayudas se realiza tomando como referencia el indicador histórico, en un 85% y el indicador del mercado de trabajo en un 15%.
En 2021, en la provincia fueron contratados 95 trabajadores eventuales agrarios por cuenta ajena, que desarrollaron diferentes proyectos de interés general en los 22 municipios que conforman el Consejo Comarcal de Empleo de Toro.
El programa se aplica en el marco territorial de los consejos comarcales, con el fin de crear y mejorar infraestructuras que posibiliten el asentamiento de actividades productivas generadoras de empleo y se enmarca dentro de las políticas activas de empleo que, de forma directa, gestiona el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal).
El Gobierno, a través del SEPE, destina créditos con cargo a sus presupuestos anuales para subvencionar los costes salariales y de cotización de trabajadores desempleados, preferentemente eventuales agrarios, contratados por las corporaciones locales.
El programa apoya el mantenimiento y la creación de infraestructuras en los ámbitos locales, a la vez que supone una garantía de acceso al empleo de las personas trabajadoras en épocas que no coinciden con las campañas agrícolas, lo que redunda en los municipios y sus habitantes.
