La Opinión de Zamora

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Los vándalos vuelven a actuar en este monumento de Toro

El Ayuntamiento condena el robo de cuatro focos de la iluminación exterior del Alcázar y los daños en los elementos de protección

Zona posterior del Alcázar de la que han sido sustraídos dos focos de luz M. J. C.

Los actos vandálicos y los robos de material se están convirtiendo en un serio problema en Toro que, además, obliga al Ayuntamiento a asumir el coste de la reparación o reposición de los elementos dañados o sustraídos.

El último capítulo de actos vandálicos registrados en la ciudad lo han escrito los autores del robo de cuatro proyectores de iluminación exterior de uno de los monumentos más importantes del patrimonio toresano: el Alcázar.

La sustracción de los focos de iluminación nocturna del monumento motivó la apertura de una investigación por parte de la Policía Local y, aunque han sido revisadas las cámaras de seguridad instaladas en el entorno, no ha sido posible identificar a los autores, porque la zona de la que han sido robados, un lateral y la parte trasera del histórico edificio, no está cubierta por el sistema de vigilancia.

Para sustraer los cuatro proyectores los vándalos utilizaron "herramientas precisas" con las que forzaron las rejillas de protección antivandálica y, una vez retiradas, procedieron a la sustracción de los focos.

Sistema de protección de la iluminación del Alcázar forzado para robar el proyector M. J. C.

El equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Toro ha condenado este nuevo acto vandálico y ha confirmado que procederá a la reposición de los focos de iluminación del monumento cuyo coste, como mínimo, alcanzará los 1.800 euros, aunque los técnicos municipales ya han dado parte del incidente a la compañía aseguradora de la entidad.

El robo de focos del sistema de iluminación nocturna no es el primer acto vandálico que se registra en el Alcázar ya que, en 2016, tras su remodelación como centro de recepción de visitantes y pocas antes de su reapertura, los vándalos rompieron uno de los focos, a pesar de que el Ayuntamiento los había reforzado con un sistema de protección.

Tras este primer incidente, uno de los focos de alumbrado nocturno fue sustraído del entorno del Alcázar, lo que obligó al Ayuntamiento a su reposición y a sufragar el coste que, como matizó entonces, “pagamos todos los toresanos”.

Por último, el equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Toro ha remarcado que “condena y denuncia” todos los actos vandálicos que se registran en la ciudad.

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