La organización agraria COAG ha alertado de que el incremento de los rendimientos máximos autorizados para la variedad tinta de Toro generará una caída del precio y excedentes de uva “sin salida comercial”. Con esta reflexión, la organización ha reprochado al Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) que no haya tenido en cuenta ninguna de sus alegaciones a la propuesta realizada por el Consejo Regulador sobre el incremento del límite máximo de rendimientos, de 6.000 a 7.500 kilos por hectárea, para la variedad autóctona tinta de Toro.

Recordó COAG que el pasado 23 de abril se publicó la solicitud de modificación del pliego de condiciones de la Denominación de Origen presentada por el Consejo Regulador que, entre otras, incluía la propuesta de aumentar, en un 25%, el rendimiento máximo por hectárea para la variedad tinta de Toro, modificación que fue aprobada por el pleno del órgano vinícola con la oposición de los vocales del sector productor.

La organización agraria decidió entonces presentar una declaración de oposición contra la solicitud de modificación del pliego de condiciones de la Denominación de Origen Toro en relación al incremento de rendimientos, tras valorar que “no hay razones productivas, ni de mercado que lo avalen”. La Junta, a través del Itacyl, ha publicado recientemente una resolución favorable a la propuesta del Consejo Regulador, sin considerar los argumentos de la organización agraria a la que tampoco ha dado traslado en plazo de la desestimación motivada. Para COAG la propuesta carece de un estudio técnico justificativo y de mercado, pero tampoco analiza las consecuencias de la iniciativa, no solo para el sector elaborador sino también para el productor, que aglutina a más de un millar de viticultores.

Del mismo modo, para COAG, la modificación no justifica ni la necesidad ni la idoneidad del aumento de rendimientos, en relación a la calidad del producto o las consecuencias en el mercado. En este sentido, destacó que varios estudios reflejan que un incremento de la producción afecta a la calidad, como así lo avala el hecho de que la uva que se comercializa fuera de la Denominación de Origen Toro procede de viñedos de mayor rendimiento por su menor calidad.

Remarcó COAG que la ampliación de los rendimientos obedece a los intereses particulares de determinadas bodegas que también producen uva, principalmente en espaldera. En este sentido, recordó que el volumen medio de producción de uva de la variedad tinta de Toro ronda los 18,5 millones de kilos por vendimia para una superficie de 5.150 hectáreas, por lo que la media de rendimientos alcanza los 3.600 kilos por hectárea. Del mismo modo, precisó que el 40% de la uva que se recolecta en Toro no está amparada por el sello de calidad, es decir, aproximadamente 8 de los 20 millones de kilos que, de media, se recogen en la zona.