Cientos de personas hicieron ayer largas colas para entrar al provocativo parque temático "Dismaland" que el cotizado artista contemporáneo Banksy ha instalado en Weston-super-Mare, una población costera al suroeste de Inglaterra.

Un millar de residentes de esa localidad recibieron entradas gratuitas para la instalación, cientos de los cuales ya estaban apostados a las puertas del parque dos horas antes de su apertura. El resto del público puede comprar entradas por tres libras (4,23 euros) a través de la página web de "Dismaland", que fue inaccesible durante gran parte del día debido, aparentemente, al gran número de visitantes que trataban de hacerse con un pase para el parque temático, que permanecerá abierto durante seis semanas. Los visitantes podrán pedir en la entrada un crédito para disponer de más dinero de bolsillo con una tasa de interés del 5.000%.

El artista ha levantado en esta ocasión un "parque temático no recomendable para los niños", dentro del cual ha reunido obras de otros 58 artistas contemporáneos, entre ellos el también británico Damien Hirst y la estadounidense Jenny Holzer. El grafitero ha creado una versión satírica de Disneyland, con varias estructuras de gran tamaño, entre las que hay un castillo similar al de Cenicienta y un estanque lleno de refugiados. "Es una exposición de arte y entretenimiento para anarquistas principiantes". "Es un parque temático familiar inapropiado para niños", señaló el artista.

Los turistas que acceden al recinto se encuentran con un castillo a medio derruir, furgones de policía, barcas cargadas de refugiados y ferias en las que no se puede obtener premio alguno. "Dismaland" ha programado además diversos espectáculos musicales, entre ellos un concierto de los grupos Massive Attack y Kate Tempest, el próximo 25 de septiembre.