La recuperación de los espacios naturales es una valiosa fuente de oportunidades y de iniciativas para la revitalización de nuestros pueblos, sobre todo en zonas como Sanabria y La Carballeda, donde se pueden encontrar joyas como la que le presentamos a continuación.

Hablamos del jardín conocido como “El Fenal”, que se encuentra en las proximidades de la localidad de Muelas de los Caballeros, en la comarca de La Carballeda. En este lugar sin igual, se puede encontrar una gran variedad de árboles muy difíciles de observar en estos y otros parajes de nuestro país. Se pueden contemplar especies como cedros del Himalaya, abetos de Guatemala, tilos plateados o húngaros, y, sobre todo, unos impresionantes ejemplares de secuoyas gigantes. Esta última especie es considerada como el organismo vegetal más grande del mundo, sería algo así como tener nuestra particular ballena azul en Sanabria, en el caso de que se pudiera hacer un símil con el reino animal. Por lo tanto, el interés público y su conservación estarían más que justificados. Y así lo contempla la ley, ya que estos árboles están incluidos en el “Catálogo de Especímenes Vegetales de singular relevancia de Castilla y León” publicado en la Ley 8/1991 de 10 de mayo y en el R.D. 63/2003 de 22 de mayo.

En estos momentos podría imaginar la pregunta que se están haciendo… ¿Cómo han ido a parar unas secuoyas gigantes a un pueblo de La Carballeda? Pues la respuesta es bien sencilla, y tiene nombre propio. Se lo debemos a nuestro vecino de Muelas de los Caballeros, Maximiliano Santiago Prieto (1875-1926).

A finales del siglo XIX y principios del XX, se denominaba coloquialmente “indiano” a aquella persona que emigraba de España hacia América en busca de oportunidades. Algunos volvieron habiendo hecho allí fortuna, otros no tuvieron tanta suerte, pero en lo que respecta a nuestro particular indiano, regresó con una gran variedad de especies y el sueño de crear su particular jardín. Y vaya si lo consiguió, prueba de ello es este maravilloso parque de “El Fenal”.

Este jardín se encuentra es un recinto amurallado de unos 12.000 metros cuadrados, donde además de las especies mencionadas, se encuentran otras tantas que fueron rescatadas por Maximiliano en sus viajes posteriores, por España y el extranjero. En su punto álgido, se han llegado a contabilizar hasta unas 500 especies vegetales.

Recientemente, en el año 2005, este lugar fue objeto de recuperación y rehabilitación, cuando se convirtió la casa que allí construyó Maximiliano en un Centro de Interpretación de la Biodiversidad Agrícola y Forestal. El proyecto fue llevado a cabo por ADISAC – La Voz, financiado por la Junta de Castilla y León y el proyecto europeo Leader Plus. En el año 2006 se abriría al público y contaría con una guía medioambiental.

Pero no todo iban a ser buenas noticias, con la llegada de la crisis empezó el abandono de este peculiar lugar. Actualmente el Centro de Interpretación está cerrado, así como el parque, ya que no está abierto al público. Aunque la familia, muy amable, si le pides poder visitar el jardín, no encuentras ningún problema, solo hay que preguntar a algún vecino o vecina por los descendientes de Maximiliano.

Las oportunidades en nuestros pueblos son escasas, y están sufriendo el abandono por parte de todos. Si queremos recuperar la vida de estas zonas, debemos preguntarnos qué podemos hacer para revitalizar estos espacios. El jardín de El Fenal es un ejemplo de ello, con una buena gestión y ayuda por parte de todos, se podría mantener abierto este lugar para el disfrute de sus visitantes, y que tendría un efecto positivo en una localidad como Muelas de los Caballeros y sus alrededores. Estos espacios, además, no solo sirven para mantener una gran variedad de plantas sino también para concienciar sobre el cuidado del medio ambiente y mostrar el rico patrimonio que existe en nuestros pueblos, de su vida y de sus habitantes. Si les dejamos abandonados a su suerte, me temo que no sobrevivirán mucho tiempo. Por lo que desde aquí hago un llamamiento para la recuperación de este fantástico lugar que es el jardín de “El Fenal”.