Una buena señalización nos salva la vida

Estoy seguro de que alguno de ustedes, en algún momento de su vida, bien como peatón, o bien como conductor, han visto cómo alguna señal de tráfico, se encontraba en mal estado.

Independientemente de que la causa del mal estado de la señal, sea el vandalismo, el deterioro por el paso del tiempo, a la falta de mantenimiento... la realidad es que el problema existe, y una mala señalización, nos puede costar la vida.

En las carreteras españolas, sin contar la señalización urbana, hay aproximadamente dos millones de señales verticales de tráfico, y un estudio de la Asociación General de la Carretera, desvela que dos de cada tres señales verticales se encuentran defectuosas.

Las señales, deben de ser visibles tanto de día, como de noche, con elementos reflectantes, y deben de ser repuestas cuando por deterioro o daño pierden su misión.

Las señales de tráfico deben producir seguridad a los usuarios de la vía, y en ningún momento generar inseguridad o duda, ni que entre señales, den información contradictoria entre sí.

Tienen que estar lo suficientemente visibles, para ofrecernos información, y poder reaccionar a tiempo ante cualquier peligro, cruce, glorieta... Otra función muy importante de las señales, es que sean respetadas por todos los usuarios de la vía.

Y aprovecho esta oportunidad, para hacer un llamamiento al civismo, para que se dejen de cometer actos vandálicos contra la señalización, ya que puede tener un fatal resultado. Y es que las señales pueden salvar vidas.

(*) Delegado provincial en Zamora de la Fundación AVATA de ayuda al accidentado.