Según informa hoy la agencia oficial Xinhua, muchos chinos están sufriendo problemas a la hora de readaptarse a la rutina diaria y no se acaban de creer que los tan esperados Juegos Olímpicos, por los que estuvieron esperando durante años, se hayan terminado.

Entre los más afectados se incluyen los estudiantes y los oficinistas, que durante las últimas semanas prefirieron reducir las horas de sueño para no perderse ninguna competición, que llegaron a celebrarse de madrugada.

Xinhua entrevista a un psicólogo de Shangai, Lin Ye, que afirma que este tipo de síndromes postraumáticos son habituales entre los seguidores de competiciones deportivas como el Mundial de fútbol, que también atrae a muchos televidentes en China.

De acuerdo con otro especialista, Yang Xiaowei, de la Universidad East China Normal, la mejor opción para superar el síndrome es alejarse del televisor e intentar realizar más actividades al aire libre.