Cáritas desmintió ayer que un usuario de la residencia San Agustín de Toro, gestionada por la entidad, fuera "engañado" a la hora de ejercer su derecho a voto el pasado domingo, como así publicó este diario, tras la denuncia pública realizada por un concejal del PSOE y por un vecino al que, el residente, le pidió que le acompañara al colegio para poder votar. El delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Zamora, Antonio Martín de Lera, explicó ayer que el usuario, P.D.F.S, que motivó el incidente denunciado públicamente, tiene plenas facultades y está capacitado para ejercer su derecho a voto, aunque se le impidió depositar su sufragio en la urna porque había solicitado "libremente" un poder notarial para votar por correo.

Ante esta petición, según explicó Martín de Lera, la notaria se personó en los días previos al domingo en la residencia "San Agustín" para dar fe de la intención del usuario que, a través de este poder, solicitó votar por correo. Sin embargo, el pasado domingo, el usuario, pidió a un conocido que se había personado en el centro para acompañar a su tía al colegio electoral, que también le acompañara a ejercer su derecho, a quien no comentó que ya había solicitado el voto por correo. Por este motivo, cuando ambos se personaron en el colegio electoral, no se permitió al anciano poder ejercer su derecho a voto. El usuario decidió entonces presentar una reclamación ante la Junta Electoral de Zona. El delegado de Cáritas desmintió cualquier "engaño" a los usuarios del centro geriátrico y matizó que, en todo momento, la entidad vela porque los residentes que, están en plenas facultades, puedan ejercer libremente su derecho a votar, aunque también trata de evitar posibles fraudes.

En relación con otro incidente sucedido el domingo y protagonizado por algunos usuarios de Intras, la Fundación ha aclarado que no ha distribuido propaganda electoral de ningún partido, que no se ha promovido el voto por correo en sus centros y que no ha facilitado papeletas de votación a ninguna personas. Asimismo, matizó que "hablamos de personas capacitadas, que pueden ser objeto de manipulación", a la vez que resaltó que parte del trabajo de a Fundación Intras es "facilitar que ejerzan su derecho a voto como ciudadanos de pleno derecho y protegerles de posibles injerencias en el ejercicio de su libertad por su propia vulnerabilidad".