Juan Vicente Herrera llegó a Fuentesaúco, vio y venció. Sin opción a preguntas incómodas de la prensa y aparentemente ajeno a la candente actualidad, con todo un ex vicepresidente del Gobierno detenido casi a la misma hora que aterrizaba en la capital de La Guareña, el presidente de la Junta y aspirante a revalidar el cargo se dio un pequeño baño de masas en el "coqueto" Teatro Municipal. Alcaldes y concejales, por supuesto de la zona, pero también llegados de Zamora -la todavía alcaldesa Rosa Valdeón mencionó expresamente a sus compañeros de gobierno-, la Tierra del Pan o del más lejano Fermoselle, aplaudían entregados al "gran jefe" que insufló moral a los candidatos dispuestos a bajar a la arena política; la mayoría de nuevo, los menos por primera vez. El ambiente era el propio de los grandes mítines; armonía, apretones de manos, agradecimientos... En Fuentesaúco no podían faltar las menciones expresas a su icono, el garbanzo, que Herrera exaltó y prometió probar en la villa dando cuenta del cocido que tiene pendiente con el alcalde, Gaspar Corrales. Y en la era de las nuevas tecnologías hubo quien no se resistió a seguir la actualidad a través del teléfono móvil. Primero unos pocos, después muchos más, luego los comentarios, gestos de sorpresa... El momento lo justificaba. Estaban deteniendo a Rodrigo Rato, quien fuera uno de los suyos.
