NEGOCIACIONES

Sumar priorizará la cesta de la compra y las hipotecas en su acuerdo de Gobierno con el PSOE

La coalición de Yolanda Díaz tratará de incorporar la reducción de la jornada laboral, convertida en seña de identidad

Yolanda Díaz en la noche electoral, junto a Ione Belarra.

Yolanda Díaz en la noche electoral, junto a Ione Belarra. / EFE

Ana Cabanillas

Yolanda Díaz hizo de su perfil negociador una baza de campaña y convirtió en bandera los acuerdos alcanzados con los agentes sociales en la pasada legislatura. En las próximas semanas, Pedro Sánchez pondrá de nuevo a prueba estas habilidades de las que ha hecho gala en la firma de un nuevo acuerdo de coalición. Tanto PSOE como Sumar confían en que no habrá grandes obstáculos para el entendimiento, pero el reto para Díaz será incluir algunas de sus medidas estrella en el pacto programático, y hacerlo aun sabiendo el PSOE que pactarán en cualquier caso. 

El 'sudoku' de la coalición de izquierdas no es sencillo, y en las últimas semanas el equipo negociador designado por Díaz, encabezado por Nacho Álvarez, se ha dedicado a recabar las "prioridades ideológicas" de los principales partidos que integran el espacio, con el objetivo de elaborar una propuesta de máximos que ofrecer al PSOE para, a partir de ahí, comenzar a negociar. 

Las peticiones son variopintas, y muchas de ellas están centradas en el ámbito regional, por parte de fuerzas como Mès per Mallorca Chunta Aragonesista, con sendos diputados por Baleares y Aragón. Pero en el equipo central de Sumar han fijado sus propias prioridades, y centrarán su batalla en tres asuntos en los que insistieron durante la campaña: la cesta de la compra, el control de los precios del alquiler y la subida de las hipotecas.

Cesta de la compra y bono hipotecario

"Son prioridades que hemos ido marcando y queremos que se vean reflejadas con toda la ambición", explicó el portavoz de campaña, Ernest Urtasun, al día siguiente de las elecciones generales, donde emplazó al PSOE a negociar un programa conjunto y la estructura de Gobierno. Una tempranísima oferta que a día de hoy sin embargo no ha llegado a concretarse, dado el interés de Sánchez en retrasar los plazos y ganar tiempo hasta que las fuerzas independentistas se decanten por el Gobierno progresista.

Yolanda Díaz siempre ha defendido la fijación de unos precios máximos en una cesta básica de la compra, una máxima que intentará plasmar en el acuerdo de coalición. En materia hipotecaria, Díaz ha abogado por crear un bono de emergencia de 1.000 euros para los hogares hipotecados a tipo variable. La medida afectaría a quienes se hayan hipotecado en los últimos diez años para comprar su vivienda habitual de hasta 300.000 euros.

Sumar cifró el gasto público en mil millones de euros que se sufragarían "con cargo al impuesto extraordinario a la banca", según venía descrito en el programa. El reto ahora será consensuar esta propuesta de máximos en una ayuda que el PSOE esté dispuesto a aceptar y que no suponga un roto en las arcas del Estado. 

En cuanto al alquiler, Sumar incluyó en su programa una serie de ayudas y planes de ampliación del parque público del alquiler. En esta materia también tiene mucho que decir Más Madrid, que ha fijado como una de sus prioridades programáticas el compromiso de reformar la Ley de Vivienda para permitir que el Gobierno central pueda declarar zonas de mercado tensionado sin necesitar la previa autorización de las comunidades autónomas. El objetivo es que puedan intervenirse los precios y saltar el veto de presidentes autonómicos del PP, como Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid

Jornada laboral

Además de estas tres materias, que son prioritarias para Díaz, Sumar también pondrá sobre la mesa una de sus grandes promesas de campaña: la reducción de la jornada laboral, con la intención de que en 2024 sea de 37,5 horas, frente a las 40 actuales. Esta medida, enfocada a la conciliación y a la gestión del tiempo, es también una concesión a Más País, cuyo líder Íñigo Errejón arrancó en la última legislatura la prueba piloto de la jornada laboral de cuatro días, convirtiendo este asunto en una seña de identidad. 

Pero más allá de las prioridades de Yolanda Díaz, también intervendrán las reivindicaciones de sus socios de coalición, a quienes la dirigente quiere contentar en las primeras semanas de puesta en marcha de Sumar. Entre las reclamaciones que los partidos periféricos han enviado a Díaz están el aumento de la financiación autonómica para formaciones regionales como Chunta Aragonesista (CHA), además del desarrollo de un régimen fiscal propio para Baleares por parte de Mès. Ambas formaciones, además, piden nuevas competencias para aumentar su autogobierno. 

Más dificultades existen con las reclamaciones de otros socios como Podemos o Compromís, que ya han manifestado abiertamente su intención de abrir una negociación con el PSOE independiente a Díaz. Unas pretensiones que los socialistas han frenado en seco.