El Zamora Rutas del Vino festejó la permanencia con su afición en una celebración completa ya que los pistacho ganaron con claridad a BM Lalín en un partido que terminó con 32-23 como marcador. Un encuentro en el que hubo minutos para todos los jugadores pistacho disponibles y tiempo para el disfrute, ya que el triunfo estuvo siempre en manos locales.

Pese a contar con la salvación ya en el bolsillo, el Zamora Rutas del Vino saltó a la pista tan enchufado como un BM Lalín con su permanencia en juego. Ambas defensas se empleaban a fondo y si bien los ataques visitantes no tenían éxito y Horcajada abría el tanteo, la igualdad fue la nota predominante durante unos primeros compases como reflejó el tanteo (1-1, m. 3).

El pulso entre ambas escuadras no se desequilibró en los siguientes compases y es que, pese a la primera inferioridad visitante y los tantos de Samudio y Jaime, BM Lalín se las apañó para evitar distanciarse demasiado mientras contó con un hombre menos. Un buen desempeño que no pudo lograr después, con todos en pista. Guille, Sarasola y Aravena, con tres auténticos golazos, afianzaron al Zamora Rutas del Vino por delante en el marcador (6-2, m. 7).

El visitante Alexandre, con una gran acción, dejó el parcial pistacho en 4-0 pero, para entonces, el conjunto de Margareto ya se encontraba muy cómodo en pista. La tranquilidad de saberse salvado y las buenas acciones de Mendieta bajo palos potenciaban su dominio ante un rival obligado a no rendirse (8-4, m. 10).

Con los pistacho dominando el envite, el partido entró durante los siguientes minutos en un tramo con pocos goles que BM Lalín aprovecho para recortar diferencias con un parcial de 0-3 fruto también del cansancio. O así pareció entenderlo un Margareto que dio entrada a varios de los hombres del banquillo mediada la primera parte (9-7, m 15). Momento también en el que los visitantes hicieron relevos para mantener su intensidad.

El baile de sustituciones pareció ser beneficioso para un Zamora Rutas del Vino que retomó los cuatro goles de ventaja en los minutos previos al descanso. Instantes que se abrieron con la inesperada lesión del local Pérez y un intercambio de errores salpicado por un par de tantos de cada equipo (14-10, m, 25). Un guion que se mantuvo hasta el paso por vestuarios pese a los fallos que cometió el cuadro pistacho y que le hicieron perder algo del colchón que Dela fijó en tres goles con el 15-12 que imperó al final del primer acto.

Decidido a redondear la fiesta de su permanencia entró el Zamora Rutas del Vino al segundo acto. Con más cambios en siete pero con la misma intensidad defensiva con la que maniató a su rival en el tiempo anterior. Solo la falta de acierto y las grandes paradas del cancerbero visitante impidieron que la ventaja zamorana creciera más allá de los cuatro goles. Un periodo de sequía al que tampoco ayudó la exclusión señalada a Toni Sánchez, circunstancia que aprovechó BM Lalín para anotar su primer gol tras siete minutos en blanco (16-13, m. 37).

Ese tanto espoleó a un cuadro gallego que, además, contó con una ocasión única a su favor en los siguientes minutos. Sarasola y Horcajada fueron excluidos en acciones consecutivas por lo que el Zamora Rutas del Vino se quedó con solo cinco en pista. BM Lalín sacó tajada de ello y se situó a solo dos tantos por debajo en el luminoso. Una situación complicada de la que se repuso el cuadro de Viriato en los siguientes minutos con tantos de Jaime y Samudio (19-16, m. 13). Una recuperación que terminaron de sellar, en superioridad numérica, los tantos de Jaime y Aravena.

Con el partido controlado, el Zamora Rutas del Vino entró en el último cuarto de hora con mejores sensaciones qeu su rival. Cometía más fallos en ataque, pero se le veía mucho más entero y centrado que un BM Lalín que apostó por los lanzamientos de Porto y Alexandre en media distancia para pelear por los puntos. La batalla, intensa, caía antes del desenlace en favor de un cuadro pistacho que se distanció con grandes acciones defensivas y tantos de variada factura forzando a su adversario a detener el partido en busca de una postrera solución de urgencia (25-18, m. 20).

El cuadro gallego apuró sus opciones de salvación mostrando carácter y garra pero chocó contra un muro casi infranqueable y recibió la estocada mortal antes del final con las paradas de Mendieta y los tantos de Marcos y Dela (27-20, m. 25). Un golpe decisivo que sentenció el triunfo pistacho con el que se redondeó la fiesta de la permanencia en el Ángel Nieto. Una celebración en la que el luminoso acabó señalando un justo 32-23 en favor de los locales.