Mejorar, progresar, avanzar, crecer. Se puede expresar de muchas maneras el objetivo que perseguirá en esta vigésimo octava jornada de División de Honor el MMT Seguros Zamora pero solo una forma tendrá de conseguir ese buen juego que persigue, dándolo todo. Una obligación casi segura pues hoy los zamoranos se enfrentan a un Amenabar Zarautz en plena forma que llega con necesidades clasificatorias al duelo entre ambos conjuntos.

Con la segunda plaza prácticamente fuera de alcance, los hombres de García Valiente centrarán sus esfuerzos en lo que resta de liga en acudir a la fase de ascenso en las mejores condiciones posibles. Un pico de forma que pretenden alcanzar no solo incrementando la carga en entrenamientos, sino compitiendo al máximo de sus posibilidades en estas tres jornadas que restan. Tres capítulos en los que el MMT Seguros deberá luchar contra el cansancio además de sus rivales.

Adversarios difíciles como lo es el de hoy, un Amenabar Zarautz que encara el choque con la necesidad de puntuar para no verse metido en problemas de última hora tras una temporada aciaga en la que las bajas le han llevado a mirar hacia abajo. Hacia un descenso que pretendrá dejar definitivamente atrás tratando de alargar su buena racha de las últimas jornadas (acumula tres triunfos consecutivos), resultados positivos en los que mucho tiene que ver la vuelta de David Aguirrezabalaga y de Mikel Iraeta.

El MMT Seguros no dará su brazo a torcer y espera luchar por el triunfo ofreciendo un gran espectáculo en un feudo siempre repleto de muchos aficionados. Público que no será tan exigente como deben ser los zamoranos a la hora de aplicarse sobre el 40x20 y tratar de poner en marcha tanto su juego habitual como las variantes que García Valiente intentará incorporar de cara al futuro en este ensayo para el que los "Guerreros de Viriato" no podrán contar con Peli y viajan con Mouriño aún "tocado".